Los titulares del Partido de los Trabajadores (PT), el Partido Comunista de Brasil (PCB) y el Partido Verde (PV) anunciaron que conformarán una coalición llamada Federação Brasil da Esperança (FE Brasil). Según informó el propio PT, se trata de una alianza electoral pero también de una base política de apoyo a un eventual gobierno del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

“Los partidos de FE Brasil actuarán en conjunto en el Congreso y en la sociedad para promover la reconstrucción del país, la defensa de la soberanía nacional, de la democracia y de los derechos del pueblo, para fortalecer la candidatura del presidente Lula y su base parlamentaria”, explicó el PT en un comunicado.

Por este pacto, que se estableció por cuatro años, la alianza deberá actuar como un solo partido, aunque con sus propios mecanismos de decisión. Funcionará con un ámbito deliberativo, una asamblea general de 60 miembros, que tomará decisiones por mayorías de tres cuartos de sus integrantes. Estará integrada por tres representantes de cada partido, y los otros 51 miembros que serán asignados según la proporción de votos que obtuvo cada una de esas organizaciones políticas en las elecciones para la Cámara de Diputados de 2018.

Para conformar ese ámbito, cada partido deberá postular integrantes, entre los que deberá incluir un mínimo de 30% de mujeres y de 20% de cuotas étnico-raciales, según informó el PT. A su vez, la federación tendrá una Comisión Ejecutiva Nacional integrada por los titulares de cada uno de los tres partidos y otros 15 miembros que se distribuirán según la cantidad de votos que obtuvo cada una de esas fuerzas políticas en las elecciones de diputados de 2018.

Según el comunicado del PT, la titular de ese partido, la diputada Gleisi Hoffmann, será la primera presidenta de FE Brasil; la del PCB, Luciana Santos, será la vicepresidenta; y el del PV, José Luís Penna, el vicepresidente segundo. Sus mandatos durarán un año y podrán renovarse por decisión unánime o rotar.

En otro comunicado los tres partidos anunciaron la formalización de la alianza. “Este 18 de abril es un hito histórico en la vida política brasileña. Nace la Federación Brasil de la Esperanza (FE Brasil), que se constituye como expresión de la necesidad y el anhelo de la unión de fuerzas populares, democráticas y progresistas para, junto a una amplia alianza, restaurar la democracia, promover la reconstrucción y la transformación de Brasil y garantizar una vida digna para el pueblo brasileño”, manifestaron los tres partidos.

Destacan que están “construyendo una nueva herramienta, innovando y renovando la forma de hacer política, apostando a la unidad y la convergencia en torno a ideales y altos compromisos” con el país. “Valoramos la democracia interna y construimos un estatuto que fomente la búsqueda de consensos”, agregan.

Los titulares de los tres partidos, que aparecen como firmantes del comunicado, señalan que FE Brasil surge con el desafío de “actuar como fuerza decisiva para liberar” a Brasil del “nefasto gobierno de la extrema derecha”. “Frente a esta gigantesca tarea, la federación deberá, en torno al liderazgo del expresidente Lula, sumar, reunir y movilizar amplias fuerzas políticas, sociales, económicas y culturales para que el pueblo y la democracia triunfen en las elecciones de octubre”, agregan. Otras metas que aparecen en el comunicado son las de conseguir “grandes bancadas progresistas en el Congreso Nacional y las asambleas legislativas” de los estados, así como un alto número de gobernadores.

Según señaló la agencia de noticias Télam, una ley de 2021 establece que las federaciones de partidos que se postulen a las elecciones como tales están obligadas a mantenerse unidas por un mínimo de cuatro años y a funcionar como un solo partido en el Congreso. Deben tener un único contenido programático, y estar unidos en todos los distritos en los que compitan, siguiendo directrices nacionales. Es por eso que el PSB, que tiene disidencias locales, optó por no formalizar una alianza en estas condiciones. De todos modos, ese partido, que propuso al exgobernador de San Pablo Geraldo Alckmin como compañero de fórmula de Lula, será parte de la mayoría oficialista en caso de que Lula gane las elecciones del 2 de octubre.