Este sábado, la Cámara de Diputados de la Nación de Argentina emitió una declaración en la que expresó su “enérgico repudio” al intento de magnicidio de la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, en la noche del jueves. Asimismo, la cámara exigió el “pronto y completo esclarecimiento” del hecho y la “condena” a los responsables.

“Exhortamos a la dirigencia toda y a la población a buscar todos los caminos que conduzcan a la paz social”, agrega el texto. Los diputados manifestaron su solidaridad con Fernández y consideraron que este tipo de acontecimiento “empaña la vida en democracia”.

Aunque la resolución fue votada por amplia mayoría, el PRO se retiró después de la votación del texto y antes de los discursos de los legisladores. Cristian Ritondo, presidente del bloque PRO, señaló: “Hemos decidido que luego de votar la resolución y habiéndose cumplido el motivo de la convocatoria, nos retiraremos del recinto. Ya que es deber del Poder Judicial quien tiene el poder de investigar, juzgar y condenar”. No obstante, otros sectores de Juntos por el Cambio, como la Coalición Cívica y el radicalismo, se quedaron en la sesión.

Mónica Macha, diputada por el Frente de Todos, subrayó que “no hay que atenuar ni bajar el precio a esa violencia, es violencia política y agravada por estar dirigida a una mujer”.

Por su parte, Luis di Giacomo, diputado del interbloque Provincias Unidas, manifestó su repudio al hecho y celebró que el Parlamento alcanzara un acuerdo de posicionamiento frente a lo sucedido.

El diputado de Libertad Avanza, Javier Milei, que no se había pronunciado sobre el hecho hasta el momento, expresó “absoluto repudio a todo acto de violencia” y calificó el acontecimiento como “un acto delictivo”, sin nombrar en su discurso a la vicepresidenta o lo ocurrido el jueves de noche. Además, el diputado pidió que “la justicia pueda hacer su trabajo libremente” sin ser “condicionada”, y cuestionó que la “casta” se preocupe cuando “los tocan a uno de ellos”. “Hay muertos hoy, hay muertos mañana y la política se sigue mirando el ombligo. Por eso nosotros dejamos en claro nuestro repudio a toda la violencia, pero no aceptamos este circo dantesco de la política”, lanzó.

En tanto, el Frente de Izquierda se abstuvo de votar la resolución por los cambios introducidos a último momento durante la reunión de Labor Parlamentaria, previa a la sesión y en la que se resolvió condenar el intento de magnicidio contra la vicepresidenta argentina. En la negociación previa se cambió en el texto una referencia a los “discursos del odio” que quería introducir el oficialismo y era rechazado por Juntos por el Cambio.

¿Qué declaró Fernández?

El viernes por la tarde la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo fueron a la casa de la vicepresidenta Cristina Fernández, ubicada en el barrio porteño de Recoleta, a tomarle declaración en el marco de la causa que investiga el intento de asesinato en su contra. En su testimonio, Fernández señaló que en el momento en que Fernando Sabag le apuntó contra la cabeza e intentó dispararle “no se dio cuenta” de lo que estaba sucediendo, según señalaron fuentes judiciales a Infobae.

La vicepresidenta indicó que no vio el arma y por ese motivo se agachó a buscar un libro que se había caído y luego continuó saludando a otras personas presentes en el lugar. Planteó que tomó conciencia del hecho una vez que ingresó a su domicilio.

Unas horas más tarde, Capuchetti y Rívolo se trasladaron para tomar declaración indagatoria de Sabag, pero se negó a declarar. Luego del intento de magnicidio, la Justicia encontró en la casa del detenido un centenar de balas. El viernes se analizaron sus mensajes y comunicaciones. Ahora, la investigación se centrará ahora en dilucidar si Sabag actuó solo, por pedido de alguien o en grupo. “Todas las hipótesis están sobre la mesa, no se descarta ninguna”, señaló al portal argentino uno de los investigadores.