Más de 98.000 viviendas de la Franja de Gaza, 25% de las que se encuentran en ese territorio palestino, fueron dañadas o destruidas en los ataques israelíes contra Hamas, informó la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Aclaró, además, que esos números podrían ser más altos debido a que no se pudo relevar la situación en algunas zonas muy afectadas por los bombardeos, en particular, en la capital, la ciudad de Gaza.
La situación en la franja es crítica, y todavía se espera la llegada de ayuda humanitaria. El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, manifestó este jueves su expectativa de que Egipto e Israel abran el paso de Rafah el viernes y permitan así el ingreso de camiones con esa ayuda.
La OMS tiene previsto enviar cargamentos de “medicinas para tratar a heridos, enfermos de dolencias cardiovasculares, cáncer y diabetes, así como suministros especiales para responder a las necesidades de unas 300.000 personas, incluidas mujeres embarazadas”, dijo su director, según citó la agencia Efe. Además, llamó a Israel a permitir el ingreso a Gaza de combustible.
También el secretario general de la ONU, António Guterres, pidió que se habilite el ingreso de ayuda humanitaria a Gaza. Después de reunirse con el canciller egipcio, Sameh Shukri, Guterres manifestó que viajó a Egipto “para poder brindar apoyo masivo al pueblo de Gaza” e insistió en el deber de respetar el derecho humanitario. “La protección de los civiles es imprescindible”, agregó, y señaló que “cualquier ataque a hospitales” y escuelas está prohibido.
El mayor de esos ataques en Gaza fue el bombardeo al hospital Al Ahli de Gaza, que dejó cientos de muertos, y por el cual Israel y las milicias palestinas se acusan mutuamente. El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, pidió este jueves que se abra una “investigación seria” al respecto, y al igual que Guterres señaló que una agresión de ese tipo vulnera el derecho humanitario internacional. “Esto tiene que decirse claramente”, afirmó.
Para Estados Unidos, que coincide con Israel en responsabilizar a las milicias palestinas, este no es el momento “apropiado” para investigar lo ocurrido. Así lo dijo el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Por su parte, Guterres también pidió a Hamas que libere a las personas secuestradas el domingo 7, cuando lanzó una serie de ataques en territorio israelí. Según el portavoz del ejército de Israel, Daniel Hagari, las familias de 203 rehenes fueron notificadas de que estos se encuentran retenidos en la Franja de Gaza. Sin embargo, aclaró que la cifra no es definitiva. Este jueves se encontraron los cuerpos de una abuela y de su nieta que se presumían secuestradas y que habían sido asesinadas durante los ataques de Hamas, que dejaron 1.400 muertos.
Mientras tanto, continúan los ataques israelíes en Gaza y el lanzamiento de cohetes contra territorio israelí por parte de Hamas. Según el Ministerio de Salud de la franja, 3.785 personas murieron allí en las últimas dos semanas.
En la frontera, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, visitó a los soldados desplegados por su país y aludió a una inminente incursión terrestre. “Ahora ven Gaza desde lejos, pronto la verán desde dentro. La orden llegará”, dijo, de acuerdo con Efe. A su vez, el jefe del Comando Sur del Ejército, Yarón Finkelman, se refirió a una ofensiva “larga e intensa”.
Según informó Europa Press, también el brazo armado de Hamas –las Brigadas Ezzedin al Qassam– manifestó este jueves que está preparado para una “larga batalla” y que “el ajuste de cuentas será duro y doloroso”.
Está previsto que el sábado se desarrolle en Egipto una cumbre internacional sobre esta crisis en la que participarán, entre otros, Guterres y el encargado de la política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, informó Sukri. El ministro de Relaciones Exteriores egipcio dijo que en el encuentro se discutirá sobre “cómo hacer cumplir los principios internacionales de derechos humanos y llevar ayuda a la Franja de Gaza”, pero insistió en que para solucionar esta situación “no hay otra alternativa que sentar a las partes interesadas en la mesa de discusión para establecer un Estado palestino independiente”.