Una de las promesas de campaña del presidente de Chile, Gabriel Boric, su reforma tributaria, que era clave para financiar el programa de gobierno, naufragó en la Cámara de Diputados. El proyecto de ley incluía una reestructuración del impuesto a la renta y una disminución de exenciones tributarias, además de impuestos para promover la preservación del medioambiente. Con ese paquete de medidas el gobierno se proponía recaudar 3,6% del PIB en cuatro años.
“Hoy la cámara rechazó la idea de legislar el proyecto de ley de reforma tributaria, perjudicando a millones de chilenos y chilenas que quieren y han luchado por pensiones dignas, mejor distribución de la riqueza, un sistema de salud que los proteja, un país más justo”, dijo Boric en su cuenta de Twitter. “Este proyecto no sólo contó con tres meses de consulta ciudadana, en donde las asociaciones de pymes fueron protagonistas, sino que con ocho meses de diálogo en el Congreso, en donde se acogieron 90 indicaciones”, agregó el presidente.
“Chile tiene al alcance de la mano un futuro lleno de oportunidades. Como gobierno seguiremos trabajando con unidad y diálogo para avanzar en mayor justicia tributaria que Chile necesita y merece para mejorar la calidad de vida de nuestro pueblo”, afirmó el mandatario izquierdista de 37 años.
El proyecto recibió 73 votos a favor, 71 en contra y tres abstenciones, pero necesitaba una mayoría especial de 78 votos para ser aprobado y continuar su trámite parlamentario. Ocho diputados salieron de sala para no votar, entre ellos algunos que pertenecen al oficialismo. Durante un año, el Ejecutivo no podrá presentar iniciativas similares en la Cámara de Diputados, aunque sí puede introducir cambios en esta reforma y tratar de impulsarla en el Senado.
Después de la votación, el diputado Frank Sauerbaum, del partido derechista Renovación Nacional, dijo que el proyecto perjudicaba a las pymes y que era un “golpe directo” a la inversión, según citó el diario El Mostrador. Por su parte, de acuerdo con la agencia Efe, el diputado Juan Antonio Coloma, de la pinochetista Unión Demócrata Independiente, dijo que “el rechazo demuestra que no es sólo de un sector político, es de quienes somos de derecha y también de centro, ya que se requería llegar a una mayoría que no se logró, creemos nosotros por la tozudez constante del gobierno de no entender que era una mala reforma que afectaba a las pequeñas y medianas empresas”.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, dijo que lo ocurrido es una “muy mala noticia” para los jubilados y las mujeres, a quienes se destinarían recursos de la reforma. Manifestó que quienes celebraron el resultado de la votación son “los partidos más a la derecha del espectro político”, y agregó: “Estoy seguro de que van a celebrar quienes evaden impuestos y quienes asesoran a los contribuyentes para evadir impuestos, porque tendrán al menos un año más para usar los mecanismos de elusión tributaria [...] Seguramente van a celebrar los lobistas que hasta el último minuto de la tramitación de este proyecto estuvieron enviando comunicaciones a los parlamentarios”.
“Lamentamos que se haya dado esta situación, lamentamos tener que comunicar esta mala noticia a la ciudadanía, lamentamos estar dando un motivo para celebración de quienes debían aportar más en el esfuerzo tributario y reevaluaremos esto con el presidente para seguir adelante con la agenda del gobierno”, agregó el ministro.
También Boric dijo, en declaraciones citadas por El Mercurio, que el rechazo de la reforma “es una buena noticia [...] para quienes eluden impuestos de manera impune, de manera vergonzosa, y quienes los asesoran, quienes podrán seguir usando resquicios a su favor y que sin duda hoy día van a celebrar la votación de la Cámara de Diputados”.
“A veces parece que el objetivo de algunos es golpear al gobierno e impedir los cambios”, agregó el presidente. “Pero quiero decirles que se equivocan, porque no es principalmente al gobierno a quien golpean o le propinan una derrota, sino a millones de chilenos y chilenas que llevan años esperando un país más justo, un sistema de salud que los proteja, un país con pensiones dignas”, dijo. “Cuando el país comienza a mostrar señales de recuperación, empezamos a salir adelante de una crisis larga, hay un sector que intenta que las cosas no cambien, dejarlas tal y como están”, manifestó el presidente chileno.
“Nuestro gobierno va a seguir gobernando, no caerá en el inmovilismo, para que la reforma tributaria que el país necesita sea una realidad que permitirá a la vez reformas de pensiones y de salud”, concluyó Boric.