Mediante una carta, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, le solicitó al canciller alemán, Olaf Scholz, que le brinde explicaciones por la ayuda económica que el gobierno de Berlín le está dando a organizaciones humanitarias que se dedican a rescatar a migrantes que navegan en embarcaciones precarias por el Mediterráneo en su intento de llegar a Europa.

La disputa entre Italia y Alemania estalló después de que la organización benéfica católica Sant’Egidio anunciara que había firmado un nuevo acuerdo con el gobierno alemán para financiar actividades de asistencia a los refugiados en Italia.

Según informó el diario británico The Guardian, un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores alemán dijo además que su gobierno había implementado un “programa de apoyo financiero” por valor de 790.000 euros para apoyar a la ONG alemana SOS Humanidad en la realización de operaciones de búsqueda y rescate en el Mediterráneo. Salvar personas que están en el mar, a la deriva, es un “deber legal, humanitario y moral”, agregó el funcionario del gobierno germano.

La ultraderechista Meloni, que llegó al poder el año pasado basada en un discurso que promovía la intransigencia hacia la inmigración irregular, le expresó al socialdemócrata Scholz, en la carta fechada el domingo, que se enteró con asombro de la iniciativa de Berlín. “Me ha sorprendido saber que su gobierno habría decidido apoyar con importantes fondos a las organizaciones no gubernamentales implicadas en la acogida de inmigrantes irregulares en territorio italiano y en los rescates en el mar Mediterráneo”, expresó la jerarca italiana.

En lo que va de este año, la llegada de migrantes a Italia se disparó y se estima que 133.000 personas llegaron a sus costas, contra las 69.800 que lo habían hecho en el mismo período de 2022. Esto está generando una enorme molestia a Meloni y a los integrantes más duros de su gobierno, entre ellos el vicepresidente del Consejo de Ministros, Matteo Salvini. Hace pocos días, la primera ministra italiana invitó a la presidenta de la Comisión Europea, la alemana Ursula von der Leyen, para que viera la situación de primera mano en la isla de Lampedusa, el territorio más austral de Italia, que es el destino más usual al que llegan las embarcaciones que parten desde las costas africanas.

“Creo que los esfuerzos, incluidos los financieros, de los países de la Unión Europea interesados en proporcionar apoyo concreto a Italia deberían centrarse más bien en encontrar soluciones estructurales al fenómeno migratorio”, expresó Meloni en la carta dirigida a Scholz.

Radio Televisión Española informó que el domingo la mandataria italiana recibió con “gran interés” la propuesta del presidente francés, Emmanuel Macron, de condicionar la ayuda a los países africanos que sean “responsables” con la inmigración.

La mandataria italiana pidió el apoyo a iniciativas con los países desde donde parten estas embarcaciones, como el reciente acuerdo que ha promovido entre el bloque comunitario y Túnez. En este contexto, Meloni le pidió a Scholz que se reúna con ella para tratar el tema durante la reunión del Consejo Europeo que se realizará en la ciudad española de Granada los días 5 y 6 de octubre.

Meloni, además, molesta con el mandatario germano, expresó que su gobierno debería centrar sus esfuerzos en prestar asistencia a los migrantes que hay dentro de su territorio y agregó que la presencia de embarcaciones pertenecientes a organizaciones humanitarias en el mar Mediterráneo puede incentivar los viajes de los migrantes. “Es bien sabido que la presencia de barcos de ONG en el mar tiene el efecto directo de multiplicar las salidas de embarcaciones precarias, lo que no sólo supone una carga adicional para Italia, sino que al mismo tiempo aumenta el riesgo de nuevas tragedias en el mar”, expresó la mandataria italiana en su carta a Scholz.

Por su parte, Salvini, quien además de vicepresidente del gobierno de Meloni es ministro de Transportes, calificó de “vergonzosos e inaceptables” a los gobiernos extranjeros que “financian asociaciones privadas extranjeras” que “llenan Italia de inmigrantes ilegales”.