“Las personas finalmente comienzan a regresar después de meses de desplazamiento forzado”, informó este miércoles la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). En el primer día del alto el fuego pactado entre Israel y la milicia chiita Hezbolá, la agencia difundió un video en el que muestra numerosos vehículos regresando a Líbano por una carretera.

Una semana atrás, Acnur publicaba el testimonio de Aya Farhat, una niña libanesa de diez años que tuvo que abandonar su hogar junto a su familia. “Estábamos aterrorizados”, dijo. Relató que le pidió a su padre que se fueran, “pasara lo que pasara”, después de que un misil alcanzó su vivienda. En ese caso, no explotó. “Si hubiera explotado habría sido una masacre porque todos los vecinos estaban sentados con nosotros en casa”, dijo.

Aya manifestó que quiere volver a la escuela y que no pase en Líbano “lo que pasó en Gaza”. Al igual que ella, otras 1,2 millones de personas fueron desplazadas por este conflicto, que dejó 3.800 muertos en su país.

Si bien la tregua rige desde este miércoles, su aplicación es gradual.

Israel se comprometió a terminar con sus ataques en el sur, pero no retirará a su ejército de allí todavía. Incluso advirtió a la población libanesa que no se dirija a algunas zonas del sur para evitar “estar en peligro”.

A su vez, el ejército de Líbano comenzó a reforzar su presencia en el sur “y a ampliar la autoridad del Estado en coordinación con la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (Finul)”.

En cuanto a la crisis humanitaria, Acnur informó que 11 camiones entregaron mantas, ropa de abrigo, colchones y otros elementos para la población afectada por la guerra. A su vez, la directora del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, Cindy McCain, dijo que se está ampliando la ayuda para quienes fueron desplazados dentro del país. Agregó que el programa intenta llegar a dos millones de libaneses.

En los últimos meses, los ataques cruzados que mantenían Israel y Hezbolá dieron paso a un intenso ataque israelí, que incluyó una invasión terrestre y causó una enorme destrucción en el sur de Líbano. La ofensiva llegó también a otras zonas, entre ellas Beirut. La capital fue atacada hasta poco antes de que comenzara a regir la tregua.

A su vez, Israel mantenía este miércoles su ofensiva en la ciudad de Gaza, donde atacó dos escuelas que servían como refugios y dejó 23 muertos, según las autoridades locales.

Varios países llamaron a alcanzar una tregua también en el enclave palestino. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que su gobierno hará “otro intento” para reanudar las negociaciones hacia un cese del fuego, y en ese diálogo participarán también Turquía, Egipto y Qatar, entre otros estados.

El canciller de Egipto, Badr Abdelaty, quien recibió en El Cairo a su par de Qatar, Mohamed bin Abderrahmán, dijo que conversaron sobre “la importancia de una voluntad política seria para llegar a este acuerdo” y para “la entrada incondicional de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza”.

El movimiento islamista palestino Hamas, que celebró el acuerdo alcanzado para Líbano, se mostró dispuesto a llegar a un pacto similar con Israel en Gaza. Sin embargo, los intentos de este tipo que ha habido no lograron resultados.

Francia anuncia “inmunidad” para Netanyahu

En el caso de Líbano, los mediadores entre Israel y Hezbolá fueron Estados Unidos y Francia.

El Ministerio de Relaciones Exteriores francés anunció este miércoles en un comunicado que el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, contará con inmunidad en Francia ante el pedido de arresto que emitió la Corte Penal Internacional (CPI) contra él y quien fuera su ministro de Defensa, Yoav Gallant, como sospechosos de haber cometido crímenes de guerra y contra la humanidad en Gaza.

Manifestó que Francia “respetará sus obligaciones internacionales, entendiendo que el Estatuto de Roma exige una plena cooperación con la CPI y prevé también que no se puede exigir a un Estado que actúe de manera incompatible con sus obligaciones en virtud del derecho internacional respecto de las inmunidades de los estados que no son parte de la CPI”.

“Dichas inmunidades se aplican al primer ministro Netanyahu y a otros ministros involucrados y deberán ser tenidas en cuenta si la CPI solicita su arresto y entrega”, agregó. También afirmó que existe una “amistad histórica” entre Francia e Israel, y que los dos países son “democracias comprometidas con el Estado de derecho”.

La líder de Los Ecologistas Marine Tondelier consideró que esta declaración es una “vergüenza”, y el dirigente de Francia Insumisa Manuel Bompard dijo que es “totalmente escandalosa” y que Francia debe aplicar las reglas del Estatuto de Roma “sin esconderse detrás de argumentos jurídicos que han sido ya ampliamente desmantelados”.