En un hecho que no se registraba desde octubre del año pasado, cuando comenzó la guerra entre Israel y Hamas, el ejército israelí ordenó este miércoles a la población civil la evacuación total de la ciudad de Gaza, la capital y principal localidad del enclave palestino.
A través de panfletos lanzados por toda la ciudad, los militares israelíes enviaron a la población mensajes indicándole dos rutas aparentemente seguras por las que deberían dirigirse hacia el sur, más precisamente a la zona de Deir al-Balah, ubicada en el centro del territorio gazatí.
La intención de las fuerzas de Israel es lanzar un ataque a gran escala sobre la ciudad para intentar derrotar a las fuerzas de Hamas que siguen en el lugar. En los días anteriores, los israelíes lanzaron fuertes ataques contra varios barrios de la ciudad considerados bastiones del movimiento islamista, que gobierna el territorio de manera exclusiva desde 2007, cuando rompieron relaciones con Fatah, el sector palestino moderado que ostenta el gobierno de la Autoridad Palestina con sede en Ramala, en Cisjordania.
Además, de acuerdo a lo que informó la agencia Reuters, el ejército de Israel anunció este miércoles que sus efectivos terminaron una operación que se extendió por dos semanas en el distrito de Shejaiya en la ciudad de Gaza, donde afirman que destruyeron ocho túneles de Hamas, en los que encontraron armas y equipos de comunicación. “Durante los combates, las Fuerzas de Defensa de Israel mataron a varias docenas de militantes [de Hamas]”, explicaron los voceros del ejército.
Sobre los combates en Gaza se expresó este miércoles el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, quien en una comparecencia en el edificio de la Knéset (Parlamento) en Jerusalén dijo que “el 60% de los terroristas de Hamas fueron muertos o heridos” desde el inicio de la guerra.
Mientras siguen los combates en Gaza y a mucho menos escala, pero también de manera permanente en varios puntos de Cisjordania -donde diariamente ciudadanos palestinos, algunos de ellos milicianos, pero la mayor parte civiles, mueren bajo el fuego israelí-, equipos negociadores se reunieron este miércoles en Doha, la capital qatarí, en un nuevo intento de lograr un cese de las hostilidades.
Las delegaciones de mediadores de Egipto, Qatar y Estados Unidos junto a una comitiva llegada desde Israel, comandada por el jefe del Mossad, Daniel Barnea, se reunieron una vez más en Qatar para intentar acercar posturas con Hamas respecto a una posible tregua en Gaza.
Según expresó una fuente de la delegación egipcia, que habló bajo condición de anonimato con la agencia Efe, algunos de los puntos ya se habrían resuelto. “Ha habido acuerdo sobre muchos puntos”, dijo, aunque sin detallar los asuntos pendientes. De todas maneras, el funcionario egipcio no ocultó su optimismo sobre lo que pueda llegar a suceder en esta nueva instancia negociadora: “Hay una oportunidad real para llegar a un acuerdo”, dijo.
Hasta el momento, no se conocieron más detalles sobre el encuentro, que contó como es habitual con la presencia del primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulrahman Al Thani; el director de la CIA, William Burns, y el de los servicios de inteligencia egipcios, Abás Kamel, así como el jefe del Shin Bet -la agencia de seguridad nacional israelí-, Ronen Bar.
Según informó el diario israelí Haaretz, se espera que luego de las conversaciones de este miércoles en Doha las negociaciones prosigan el jueves en El Cairo, la capital de Egipto, país que es el negociador natural entre los israelíes y Hamas.
Por su parte, y haciéndose eco de estas negociaciones, el líder de la milicia chiita libanesa Hezbollah, Hassan Nasralah, dijo en un discurso emitido desde su búnker que la organización que lidera detendrá de inmediato sus operaciones contra los israelíes “sin discusión ni negociación” si las autoridades de Israel y Hamas llegan a un acuerdo de alto el fuego.
Al mismo tiempo, el influyente líder de la entidad proiraní declaró que sus fuerzas están logrando el objetivo de su campaña, que es “desgastar al enemigo en términos de seguridad, moral, económica y socialmente”.