El presidente chino, Xi Jinping, advirtió este lunes que el proteccionismo “no conduce a ninguna parte”, en el inicio de una gira por el sudeste asiático que tiene como objetivo fortalecer las relaciones comerciales regionales para compensar el impacto de los aranceles anunciados por la administración estadounidense que lidera Donald Trump.
Contrastando con la imagen que proyecta el republicano, Xi está tratando de presentarse como un socio confiable y estable, y en este contexto llegó este lunes a Hanói, la capital de Vietnam, primera escala de un viaje en el que el mandatario chino y su delegación también visitarán Malasia y Camboya, de acuerdo a lo que informó AFP. La visita es, según afirman desde el gobierno de Pekín, “de gran importancia” para la región.
Durante las reuniones entre los funcionarios chinos y vietnamitas se firmarán alrededor de 40 acuerdos en diferentes sectores, según anunció el sábado el vice primer ministro de Vietnam, Bùi Thanh Sơn. El expresidente vietnamita Tô Lâm, quien actualmente ocupa el cargo de secretario general del Partido Comunista, la única fuerza política que existe en el país, escribió en un artículo publicado en medios estatales el lunes que Hanói quería impulsar la cooperación en defensa, seguridad e infraestructura, especialmente en las conexiones ferroviarias.
Por su parte, Xi escribió en un artículo publicado este lunes por el periódico vietnamita Nhan Dan, citado por la agencia de noticias estatal china Xinhua: “Nuestros dos países deben salvaguardar resueltamente el sistema de comercio multilateral, la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro globales, así como un entorno internacional abierto y cooperativo”. “Una guerra comercial y arancelaria no tendrá ganadores, y el proteccionismo no conduce a ninguna parte”, destacó el líder chino.
Los nuevos aranceles impuestos por Estados Unidos a China, en el marco de la ofensiva proteccionista adoptada por Trump, ascienden a 145%. La medida sacudió los mercados mundiales y llevó a Pekín a imponer aranceles de 125% a los productos estadounidenses.
En medio de esta guerra comercial promovida por Washington, China anunció el lunes que sus exportaciones se dispararon un 12,4% interanual en marzo, un resultado que superó las expectativas de los analistas. La cifra representa más del doble del 4,6% proyectado por la agencia financiera Bloomberg. Sin embargo, las importaciones en el mismo período cayeron un 4,3%, según informó la Administración General de Aduanas de China.
El sudeste asiático es una región clave para las exportaciones chinas. El año pasado, los países que integran la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean, por sus siglas en inglés) fueron los principales destinos de las mercancías exportadas por Pekín, con un total de 586.500 millones de dólares en productos, según datos oficiales.
Entre los países de la región se destaca Vietnam, con 161.900 millones de dólares de importaciones chinas, seguido de Malasia, que en 2024 importó bienes chinos por valor de 101.500 millones de dólares.
A pesar de las disputas territoriales en el Mar de la China Meridional, China y Vietnam mantienen estrechas relaciones económicas. Vietnam, sin embargo, comparte la preocupación de Washington por la creciente agresividad de China en el mar en disputa. China reclama la mayor parte de este territorio marítimo, que se disputan Filipinas, Malasia, Vietnam, Indonesia y Brunéi.
Xi dijo, en el artículo publicado este lunes, que Pekín y Hanói pueden resolver las disputas a través del diálogo. “Debemos gestionar adecuadamente las diferencias y salvaguardar la paz y la estabilidad en nuestra región”, escribió el mandatario chino, quien está en el poder desde 2013.
Después de Vietnam, Xi visitará Malasia de martes a jueves y ese día volará hacia Camboya, último destino de la gira.