En el país, que ha sido devastado por la guerra civil durante más de dos años, el brote de cólera más mortífero se ha producido en la región occidental de Darfur. Según información proporcionada por Médicos sin Fronteras (MSF), al menos 40 personas murieron a causa de esta enfermedad gastrointestinal en una semana. Los equipos de MSF trataron a más de 2.300 pacientes la semana pasada.

En los últimos 12 meses se registraron 2.470 muertes por cólera, y se estima que casi 100.000 personas se infectaron durante este período, según la organización de médicos. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, entre enero de 2023 y julio de 2025, en Sudán murió más gente por cólera que en cualquier otro país del mundo. La tasa de mortalidad por esa causa, del 2,1%, es superior en más del doble y medio al promedio mundial.

Según MSF, la guerra civil en curso en el país facilitó las condiciones para el brote, debido a que las partes en conflicto negaron a la población el acceso al agua potable para medidas de higiene básicas como lavar platos y preparar alimentos.

La situación es más grave en los alrededores de la ciudad de Tawila, donde 380.000 personas han huido debido a los combates en torno a la ciudad de Al-Fashir. En la región, la gente tiene que sobrevivir con tan sólo tres litros de agua al día para todas sus necesidades, desde beber hasta la higiene personal.

El cólera puede matar en cuestión de horas si no se trata

Un periodista de AFP reportó escenas dramáticas en un centro de cuarentena en Tawila: varias mujeres y una niña recibían líquidos intravenosos, y personas debilitadas yacían a su alrededor en catres. La residente Mona Ibrahim contó que quienes se encontraban en el refugio improvisado bebían agua mezclada con limón como “medicina” mientras la fruta estaba disponible. No hay baños en el campamento, y los niños tienen que defecar al aire libre.

El cólera es una enfermedad gastrointestinal grave que se transmite a través del agua o los alimentos contaminados. La infección se acompaña de diarrea, vómitos y calambres musculares y, si no se trata, puede causar la muerte en cuestión de horas. Los afectados en Sudán a menudo carecen de acceso a atención médica y medicamentos. En muchos lugares no hay agua potable.

La Unión Europea (UE) y otros 28 estados pidieron una acción conjunta ante la situación en el país. Se instó a todas las partes en conflicto a declarar una “pausa humanitaria inmediata” y poner fin al asedio de Al-Fashir. Una declaración firmada por la UE, Alemania, Reino Unido, Japón y Canadá, entre otros, afirma que las personas en los campos de refugiados de Al-Fashir y sus alrededores necesitan alimentos, ayuda vital y rutas de escape seguras.

La guerra civil en Sudán se extiende desde abril de 2023. El ejército del gobernante militar Fattah al-Burhan y la milicia de las Fuerzas de Defensa de Sudán (FRS) de su exvicepresidente Mohammed Hamdan Daglo llevan más de dos años librando feroces batallas por la supremacía en este estado del noreste de África. Según la ONU, decenas de miles de personas ya han muerto en el conflicto.

Este artículo fue publicado originalmente por Die Tageszeitung.