El mandatario boliviano anunció que entre el 20 y el 22 de abril se celebrará en su país la Primera Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra que tendrá como sede la ciudad de Cochabamba, en el centro del país.

Evo Morales leyó una convocatoria en la que resaltó algunos de los principales objetivos de la futura cumbre, entre ellos la conformación de un “referendo mundial de los pueblos sobre cambio climático” y el desarrollo de líneas estratégicas de acción “en defensa de la vida frente al cambio climático”, informó ayer la agencia de noticias EFE.

El mandatario convocó a analizar en el encuentro las causas estructurales del cambio climático y determinar medidas que apunten a soluciones de fondo que permitan “el bienestar de toda la humanidad en armonía con la naturaleza”. Anunció además que se proyecta una Declaración Universal de Derechos de la Madre Tierra.

La conferencia servirá como plataforma de preparación para la próxima cumbre sobre cambio climático que se celebrará en México a fines de 2010, aseveró. En la accidentada reunión de Copenhague, dijo Morales, fueron los pueblos y su lucha quienes evitaron una declaración que fuera “impuesta” por las naciones capitalistas sobre este tema.

La organización del encuentro surge como respuesta al fracaso de la reciente Cumbre de Copenhague, a la que concurrió el presidente de Bolivia junto con su par venezolano, Hugo Chávez, y otros representantes latinoamericanos. Ambos mandatarios llevaron a Dinamarca una posición conjunta, sumamente crítica con la cumbre, surgida de la última reunión de la Alternativa Bolivariana (Alba).

Otro de los hechos políticos del día en Bolivia fue la entrega de credenciales a las autoridades elegidas el 6 de diciembre. Morales, quien fue reelecto en su cargo, recibió las credenciales en una ceremonia, igual que su vicepresidente, Álvaro García, como máximos representantes del Poder Ejecutivo del país. También las recibieron los 36 senadores titulares y los 130 diputados electos.

Los legisladores tendrán su primera sesión como representantes del cuerpo legislativo boliviano el 22 de este mes, día en que se inaugura la nueva Asamblea Plurinacional que contará, por primera vez, con siete representantes de las comunidades indígenas del país.

El partido oficialista Movimiento Al Socialismo tendrá mayorías especiales en la Asamblea, mientras que en segundo lugar se ubicó el partido Convergencia Nacional, del derechista Manfred Reyes Villa, quien carga en su cuenta con unas veinte denuncias por delitos económicos supuestamente cometidos cuando fue gobernador de Cochabamba.

Reyes, a quien la justicia le prohibía salir del país, no aparece en público desde hace unos veinte días, por lo que las autoridades sospechaban que habría abandonado territorio boliviano; desde Perú, la Dirección General de Migraciones confirmó ayer que así lo hizo. Se informó que el ex candidato de la oposición entró a Perú en la mañana del 15 de diciembre a través del paso fronterizo de Iñapari, en la región amazónica. Según las autoridades peruanas, indicó EFE, el mismo día se habría trasladado a Lima y en los primeros minutos del 16 habría tomado un vuelo de American Airlines con destino a Estados Unidos.