Un atacante suicida detonó sus explosivos en medio de cientos de personas que esperaban la llegada de los pasajeros de unos 30 vuelos, la mitad de ellos internacionales, en el principal aeropuerto de Moscú, Domodédovo. Las imágenes de lo ocurrido, registradas por los testigos con cámaras y teléfonos celulares, mostraron una densa capa de humo bajo, montones de cuerpos sin vida y cómo trasladaban a los heridos en los carritos para equipajes, reportó la agencia de noticias EFE.

El presidente ruso, Dmitri Medvedev, prometió perseguir y castigar a los responsables del ataque, que dejó 35 muertos, 170 personas heridas, de las cuales 74 fueron hospitalizadas y 40 estaban graves ayer. Además, el mandatario suspendió su viaje a Suiza donde pronunciaría el discurso inaugural del Foro Económico Mundial de Davos el martes.

Los independentistas del Cáucaso Norte habían prometido para 2011 un aumento de las acciones violentas en Rusia, con ataques a sitios clave para la economía y el transporte. Además amenazaron con atentados contra los Juegos de Invierno de 2014, programados en Sochi, una región que consideran parte de su tierra, recordó la agencia de noticias Reuters.

Al cierre de esta edición se sabía que el autor del atentado sería un hombre de unos 30 años que habría hecho explotar la carga explosiva que llevaba consigo. “La investigación presta especial atención a esclarecer cómo se logró introducir el artefacto explosivo en el aeropuerto y cómo actuaron los agentes de los servicios de seguridad”, dijo a la prensa el portavoz del Comité de Investigación de la Federación Rusa, Vladimir Markin.

Una fuente policial informó a la agencia estatal rusa, RIA Novosti, que “los servicios secretos fueron advertidos de un posible atentado en uno de los aeropuertos capitalinos y buscaban a tres sospechosos. Pero éstos consiguieron penetrar en el aeropuerto, constataron que su cómplice ejecutó la explosión y abandonaron la terminal”.

Medvedev criticó con fuerza en los meses pasados al Servicio Federal de Seguridad y a las autoridades de la región del Cáucaso Norte, por entender que su lucha antiterrorista daba pocos resultados. Pidió que se “tomen medidas” y ordenó redoblar la seguridad en las principales terminales de transporte del país.

Por su parte, el primer ministro, Vladimir Putin, dispuso que se ofrecieran indemnizaciones a los afectados y sus familiares.

La fuente policial consultada por RIA Novosti explicó que el atacante fue conducido en auto hasta el aeropuerto y entró sin dificultades en el edificio, subió al segundo piso, en el que no hay guardias de seguridad ni detectores de metal, y activó la bomba que llevaba consigo. La Fiscalía rusa abrió ayer una causa penal por terrorismo.