Los rebeldes aseguraron ayer al canal qatarí Al Jazeera que sus hombres habían capturado a dos hijos de Gadafi, Saif el Islam y Saadi. La misma fuente indicaba que la guardia personal del líder libio había depuesto las armas mientras una operación conjunta entre las fuerzas militares rebeldes, su gobierno -el Consejo Nacional Transitorio (CNT)- y la OTAN, iniciada en la noche entre el sábado y ayer, había lanzado la batalla de Trípoli. Según informó la agencia de noticias AFP, el operativo supuso la llegada por el mar de rebeldes desde la ciudad de Misrata, en el este de Trípoli.

Al Jazeera difundió que ayer de tarde los rebeldes ya estaban en la plaza Verde, centro de la capital y símbolo del gobierno, cercana a su cuarte general. “Tenemos previstas dos posibilidades: que se rinda o que abandone la ciudad”, dijo a la AFP el vocero de los rebeldes Ahmed Jibril, refiriéndose a Gadafi. Según la agencia de noticias EFE, las fuerzas de la OTAN volvieron a bombardear el cuartel general y también atacaron el aeropuerto capitalino de Matica en la madrugada de ayer, al tiempo que cobraba fuerza la versión de que el canal estatal también había quedado bajo control del CNT.

A por él

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, denunció hoy que el imperialismo de Estados Unidos y sus aliados de Europa están perpetrando "una masacre" en Libia con el fin último de hacerse de las riquezas petroleras de esa nación. "Eso es lo que están haciendo en Libia: produciendo una masacre" y excusándose en que lo hacen "para salvar vidas. ¡Qué descaro, qué cinismo, pero es la excusa para invadir, para tomar un país y sus riquezas", manifestó Chávez en un discurso televisado, según consignó EFE. Chávez recordó que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) ha certificado que en Venezuela se encuentra "la primera riqueza petrolera del mundo", y advirtió que sus opositores, dirigidos por los "imperialistas", tienen planes de desencadenar en el país una violencia similar a la de Libia y Siria. En el marco de un acto religioso de católicos y evangélicos por su salud, Chávez agregó que "hoy [por ayer] tiraron no sé cuántas bombas y están cayendo ya de manera descarada y abierta, ya ni siquiera se molestan en explicar nada, sobre escuelas, hospitales, casas, centros de trabajo, fábricas, campos agrícolas de Libia. Es lo que ocurre en este mismo momento, por lo que pidamos a Dios por el pueblo libio y por los pueblos del mundo".

Antes, la televisión libia había llegado a emitir tres mensajes de Gadafi en menos de 24 horas, en los que aseguró que no tiene intensión ni de entregarse, ni de abandonar el poder. Además, hizo un llamado a la población a “marchar por millones”, pidió abrir “los almacenes de armas” para entregarlos “a las masas” y llamó a “los religiosos que siempre están en primera fila y buscan el martirio” a que salgan a “limpiar Libia de los ratones”. También afirmó que “se está armando a las familias” y convocó a “todos los libios” a que se unan “a la batalla de Trípoli para impedir que el enemigo tome esta ciudad”.

“No cederemos nunca, triunfaremos. ¡Adelante, adelante! ¡Alá es grande!”, lanzó, y garantizó que todavía permanece en la ciudad. Acusó al presidente francés, Nicolas Sarkozy, de promover los bombardeos de la OTAN para “adueñarse del petróleo libio” y a los rebeldes de ser sus “agentes”. Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos fueron los primeros países en comenzar los ataques, luego de una resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que autorizó que operaciones aéreas para “proteger a la población civil”. En la última de las tres intervenciones, advirtió a los libios que si no se defienden terminarán “esclavos del colonialismo”.

El portavoz del gobierno libio, Moussa Ibrahim, dijo ayer de tardecita en una conferencia de prensa que murieron por lo menos 1.667 personas desde el comienzo de la ofensiva sobre Trípoli. Sólo ayer de tarde, según él, fallecieron 1.300 y hubo 5.000 heridos. Antes de llamar al diálogo reconoció que la situación en la capital es “dramática” y que los hospitales están desbordados.

Desde la rebelión afirmaron a Al Jazeera que los gadafistas estaban vencidos en gran parte de la ciudad y que se estaban replegando hacia el cuartel general. También se dijo que decenas de miembros de las fuerzas de seguridad oficiales fueron capturados y que el emblema de los rebeldes flotaba en muchos edificios. Miles de habitantes de esa ciudad, bombardeada desde hace meses por la OTAN y afectada por constantes cortes de energía, intentaban huír ayer. El canal qatarí mostraba anoche imágenes de festejos en las calles en las que se veía gente saltando sobre imágenes de Gadafi. Uno de los jefe militares rebelde, Abdel Hakim Belhlaj, pronosticó: “Que de aquí a mañana [por hoy] Trípoli ya habría caido en nuestras manos”.

Desde Estados Unidos, Francia, Alemania y Reino Unido, los respectivos gobiernos coincidían en que el desenlace y el final del régimen de Gadafi está cerca.