El primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan, cuya relación con el gobierno israelí se mantiene tensa, pidió ayer a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el pleno de su Asamblea General, que presione a Israel y se demuestre "claramente que no están por encima de la ley" y animó a la organización a hacer más de lo hecho hasta ahora "para poner fin a la tragedia humana de los palestinos". Erdogan también se refirió a la "agresión" de Israel de mayo de 2010 al abordar la Flotilla de la Libertad, y reiteró su reclamo de que Israel se disculpe.
Otro país que está enfrentado a Israel, Irán, también tuvo su momento de protagonismo ayer en la sesión de la ONU. Las delegaciones de Israel, Estados Unidos y los 27 países de la Unión Europea abandonaron el pleno de la Asamblea General para dejar solo al presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, cuando dio su discurso y habló de "potencias arrogantes" que "amenazan con sanciones y acciones militares a cualquiera que cuestione el Holocausto y el evento del 11 de setiembre".
Ayer los esfuerzos diplomáticos y la atención seguían centrados en el reclamo palestino del reconocimiento de la ONU a un Estado palestino como miembro de esa organización.
La iniciativa palestina que se presentará ante el Consejo de Seguridad hoy necesita el voto de nueve de sus 15 miembros. Eran todavía pocas ayer las certezas acerca de la postura de muchos de ellos. Varios países, como Francia o India, indicaron que tomarán posiciones una vez cuenten con el texto que presentará el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas. El canciller palestino, Riad al Malki, aseguró que están seguros de que con el voto favorable de Gabón cuentan con siete respaldos, aunque no precisó cuáles eran los demás. Ocho de los miembros del Consejo reconocen el Estado palestino -Gabón, India, Sudáfrica, Brasil, Líbano, Nigeria, China, Rusia-, pero eso no significa que todos respalden su iniciativa en la ONU. De la misma forma, alguno de los miembros que no reconocen un Estado palestino -Portugal, Bosnia y Herzegovina, Colombia, Francia, Inglaterra y Alemania- podrían sorprender con su voto, mientras que Estados Unidos ya anunció que vetará cualquier resolución favorable a esa iniciativa.
Una campaña
"Está claro que Israel no quiere que nazca un Estado palestino soberano e independiente, quiere otorgar un semi Estado, a la medida que él lo confeccione", aseguró en declaraciones a la diaria el embajador palestino en Argentina, Walid Muaqqat. Consideró que la solicitud de reconocimiento de un Estado palestino ante la ONU -organización que "dio existencia al Estado de Israel", recordó- es un "paso pacífico de parte del pueblo palestino para reclamar sus derechos".
"No es un acto unilateral, sino que se trata de ir al lugar más adecuado, donde todas las naciones en el mundo van a solucionar sus problemas", aseguró, y reiteró que "el Estado de Israel se creó en 1947 mediante una resolución que hablaba de dos Estados: uno árabe palestino, uno israelí judío. Ahora podemos ver que de esa resolución, a un hijo lo niegan y al otro lo aceptan aunque salieron los dos del mismo vientre".
Aseguró que la presentación ante el Consejo de Seguridad es "un hecho pacífico que no contradice a nadie ni reemplaza las negociaciones de paz", que serían retomadas aun con un Estado palestino reconocido. Este proceso recién comienza y "puede durar un mes, dos meses, o tal vez tome más tiempo" antes de que se llegue a una decisión final, dijo. "Nosotros no estamos apurados, esperamos 63 años, podemos esperar un tiempo más", añadió.
Indicó que todavía no hay una decisión sobre el camino a seguir una vez que la ONU responda a la solicitud palestina, tanto si es rechazada porque no alcanza los nueve votos necesarios en el Consejo de Seguridad, como si es vetada por Estados Unidos. "La dirección palestina estudiará el caso y tomará las decisiones correspondientes", señaló. Lo mismo hará en caso de que se vaya a la Asamblea General y se obtenga un estatus de Estado observador.
"Las negociaciones entre Israel y Palestina han llegado a un punto muerto", opinó el embajador. También criticó la posición del presidente estadounidense Barack Obama, que ayer reiteró a su par palestino, Mahmud Abbas, que vetará una resolución favorable a su reclamo en el Consejo de Seguridad. El embajador sostuvo que el discurso que dio el miércoles Obama en la ONU "es frustrante y decepcionante. .. es una patada a la legalidad internacional cuando dice que las resoluciones de la ONU no van a llevar la paz".
La otra campaña
El embajador israelí en Montevideo, Dori Goren, invitó a varios medios a la sede diplomática para explicar la postura de su país. “Es cierto, Israel ocupa territorios de Cisjordania”, indicó, para después precisar que cuando su país tomó esos territorios “no estaban definidos” porque no había un Estado palestino.
Reiteró la visión de que los palestinos no aceptan dos condiciones “básicas” para alcanzar un acuerdo de paz: el reconocimiento de Israel como el Estado del pueblo judío y la renuncia a las fronteras de 1948. También se refirió al límite que Israel quiere poner para el derecho al retorno de los palestinos que vivían donde hoy es Israel, como un punto en el que su contraparte no acepta ceder. “Ningún país normal puede aceptar que tres millones de palestinos tengan derecho a volver, no al Estado palestino, sino a Israel, a lo que eran sus hogares antes en Tel Aviv, en Jaffa, sería para nosotros un suicidio”, dijo, y agregó: “no aceptamos el derecho de retorno porque no queremos perder la identidad judía de nuestro Estado”.
Aseguró que “si no hay un Estado palestino es porque los palestinos no quieren volver a las negociaciones”, y que como ellos “se dieron cuenta de que no tienen chance en lo militar ni en la negociación, fueron a otros dos terrenos”, en referencia a las organizaciones internacionales y la opinión pública internacional, que a su entender son favorables a la posición palestina.
El embajador agregó que los palestinos “pueden obtener una victoria en la opinión pública y en el terreno internacional, pero si van a querer tener su Estado, no hay otra forma, hay que negociar con nosotros”. Manifestó que la intención palestina es lograr el estatus de Estado observador sin voto en la ONU, lo que les permitiría ingresar a otros organismos de Naciones Unidas donde “van a hacer causas contra Israel para deslegitimarlo”.
Goren reconoció que sería “más difícil” la situación para Israel si Estados Unidos no estuviera en el Consejo de Seguridad, para aplicar su derecho a veto en caso de que el reconocimiento lograra los votos necesarios. Consultado sobre si Israel no tendría más derecho a hacer reclamos a los palestinos si éstos conformaran un Estado, señaló: “Israel no va a reconocer ese Estado”.