El Consejo de Ministros terminó ayer de fijar las prioridades para este año. Siete ministros hicieron sus presentaciones, y se fijó una reunión entre Mujica, algunos ministerios en representación de los gabinetes y la bancada de legisladores del Frente Amplio para el viernes 10, para coordinar la presentación de los proyectos de ley de 2012.
Uno de los puntos abordados, planteado por el ministro de Trabajo, Eduardo Brenta, fue la falta de mano de obra calificada y las medidas para contrarrestar el efecto que eso puede tener en la economía. “En función del crecimiento previsto de la economía, siendo muy austeros, en materia de generación de empleo el país se va a enfrentar a una demanda de unos 25.000 puestos de trabajo este año”, consideró, en diálogo con la diaria. De los 93.400 desocupados que hay actualmente, más de 50% tiene formación primaria, 32%, secundaria incompleta y 10%, educación técnica. “El país se está enfrentando a una situación en la que los recursos humanos comienzan a convertirse en un riesgo en términos de desarrollo”, resumió Brenta.
Para impedir esto el gobierno plantea como una de las políticas facilitar el regreso de los uruguayos que viven en el exterior y la migración selectiva, es decir, promover “determinado tipo de migración de ciudadanos extranjeros en áreas en las que no hay uruguayos con formación”, explicó Brenta.
Por un lado, el ministerio ya creó una oficina específica que trabaja para localizar a los uruguayos en el exterior que quieren retornar y facilitar la búsqueda de empleo. Brenta anunció que en marzo comenzará a funcionar el portal Vía Trabajo, en el que las empresas públicas y privadas podrán difundir sus ofertas laborales. La idea del ministerio es que la propia cartera pueda hacer la intermediación para que el interesado en venir a Uruguay lo haga con trabajo.
En materia de extranjeros que puedan radicarse en nuestro país, Brenta señaló que el perfil sería de alta calificación o en áreas en las que no haya uruguayos formados. Sobre el origen, el ministro informó que se mira a los países donde han emigrado más, particularmente España, y se considera difícil que sea posible la inmigración desde la región, ya que las economías vecinas “están en una situación parecida a la nuestra”.
Brenta señaló que Uruguay “puede brindar muchas ventajas” una vez que se consigue un trabajo, ya que por ejemplo se soluciona el pago en salud del trabajador y sus familiares, pero reconoció que pueden existir “problemas” como el acceso a la vivienda o diferencias en materia salarial: “Aun con Europa en crisis los niveles salariales en personal calificado tienen una brecha con lo que paga Uruguay”, indicó. “Habría que hacer un esfuerzo más para efectivamente poder captar trabajadores calificados que no van a venir a ganar salarios inferiores”, agregó Brenta.
Mujica planteó ayer que Uruguay debe ser “liberal” en materia de inmigración y que debe estar “abierto” a los inmigrantes, más tomando en cuenta que está estancado el crecimiento demográfico. El presidente dijo que es necesario “flexibilizar las políticas de inmigración”, y mencionó, por ejemplo, las dificultades para que los niños inmigrantes se puedan incorporar al sistema educativo en cualquier momento del año. “Somos un país de inmigrantes, no nos tiene que asustar pensar en esto”, concluyó Brenta.
En anteriores oportunidades, Mujica planteó la necesidad de promover la inmigración de latinoamericanos que se quieran radicar a trabajar en el campo. Brenta señaló que, actualmente, se constata un nivel de inmigración desde Perú, fundamentalmente de trabajadores que se insertan en el sector pesquero y en servicio doméstico.