Una mujer mapuche, con su hijo de un año y medio en brazos, le grita a un carabinero "que estoy con la guagua (el bebé) weón", lo empuja y él le devuelve el empujón. La mujer deja al niño con su otra hija, que es la que está grabando el video, y vuelve a empujar al carabinero, recriminándole que la empujó y la maltrató mientras tenía el niño en brazos. El oficial le pega con la culata de la escopeta, y cuando ella retrocede le pregunta “¡¿qué te llevas?!” y le apunta. Antes del ruido del arma al ser amartillada se escucharon los gritos de la hija, y del niño, que piden por su madre; un poco después la voz infantil se repite: "corre, corre mamá, que van a venir". Los mapuches retroceden y otro carabinero viene corriendo desde lo lejos. Cuando está casi encima de ellos se escucha el grito de la joven pidiendo ayuda y se apaga la imagen.

Fuera de las imágenes -que recorrieron redes sociales, medios de comunicación y llegaron a la Justicia- el último carabinero se acercó para detener a madre e hija. Antes de que comenzara la grabación, la mujer intentaba evitar que los carabineros ingresaran a su casa, donde otros dos niños estaban resguardados.

Versiones oficiales

La agresión a la mujer mapuche ocurrió luego de que la comunidad levantara barricadas en la ruta 5 por un conflicto que tiene como origen las tierras en obras de un aeropuerto de la zona. Según los carabineros, cuando llegaron los efectivos y lanzaron bombas lacrimógenas sobre los "encapuchados" que cortaban la ruta, ellos huyeron hacia los cerros. Por eso, argumentan, ingresaron sin autorización en los terrenos que se encuentran a los costados de la carretera, en busca de los "encapuchados". En el primer informe de carabineros se indicó que en el forcejeo con algunos mapuches que se negaron a dejarlos pasar a su propiedad privada, fueron detenidas Guillermina Painevilu, de 37 años, y Jessica Guzmán, de 20. Ellas son la madre y la hija en el video. Fueron acusadas por desórdenes públicos, maltrato a carabineros de servicio y daño fiscal.

Enseguida, miembros de la comunidad dijeron que las mujeres no habían participado en las barricadas sino que sólo estaban mirando, y que habían sido maltratadas, pero la denuncia ganó relevancia recién cuando apareció el video, en el cual el abuso es innegable.

Las mujeres fueron dejadas en libertad después de que el juez Federico Gutiérrez vio la grabación, consideró ilegal el arresto y ordenó a la Fiscalía que investigara los hechos. Gutiérrez también ordenó a Carabineros que instruyera a sus agentes para que respeten la ley e instó a la Fiscalía Militar a investigar los presuntos maltratos.

El jefe de Carabineros en esa región, el general Iván Bezmalinovic, declaró al canal 24 Horas que los oficiales estaban siendo agredidos, pero que se va a revisar el video "cuadro a cuadro" para "poder precisar si hay o no golpes en contra de la señora". Con ese fin dispuso iniciar una investigación que estará a disposición de la Fiscalía Militar cuando ésta "lo requiera".

El intendente de La Araucanía, Andrés Molina, exigió a Carabineros un informe sobre su actuación y pidió al Servicio Nacional de Menores que también investigue los hechos. "Queremos cuidar a nuestros niños. Nuestra preocupación es que ellos no sufran daños psicológicos que luego tengamos que lamentar", señaló, y agregó que le precupan las mujeres, los niños, y "por supuesto, el exceso de violencia que se ha visto en la región en los últimos días". Lo sucedido también será investigado por el Servicio Nacional de la Mujer.

Violencia a la orden

Molina se refería a que el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, responsabilizó por los incendios que se vienen produciendo a un grupo de activistas mapuches, la Coordinadora Arauco Malleco, que rechazó la acusación. Los allanamientos y la presencia policial han aumentado en las zonas de Chile con mayoría mapuche.

Por los incendios son investigados 42 mapuches en base a la Ley Antiterrorista, que fue aprobada por la dictadura de Augusto Pinochet y que permite duplicar los años de condena y citar a testigos anónimos.

En un comunicado conjunto con autoridades locales, emitido días atrás, la directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Lorena Fries, expresó su preocupación por la tensión generada en la región de La Araucanía por las declaraciones de las “autoridades políticas”, que “exacerban un clima de prejuicio y desconfianza”, y manifestó su rechazo a “la violencia” con la que han actuado los carabineros. También recordó que la Corte de Apelaciones de Temuco dictó al menos dos fallos conminando a Carabineros a “enmarcar sus procedimientos dentro de los límites que la ley y el respeto a los derechos humanos les imponen”.

Ningún miembro del Ejecutivo se pronunció sobre lo sucedido, ni siquiera el presidente Sebastián Piñera, que en mayo de 2011, cuando algunos carabineros fueron levemente heridos en las protestas estudiantiles, prometió que quien atentara contra “Carabineros (...) la propiedad pública, y la privada” se iban “a encontrar con una legislación dura, firme”.