Decenas de miles de personas participaron ayer en una marcha convocada por el grupo Sayonara Nukes (adiós a los nucleares) por el centro de Tokio para reclamar el fin de la energía atómica en Japón. La protesta fue convocada en rechazo a la reapertura de los primeros reactores nucleares, luego de que el accidente en la central de Fukushima llevara a desconectar los 50 que tiene el país para someterlos a mayores controles de seguridad. El primero fue reactivado a principios de este mes, y está previsto que otro comience a funcionar a fines de julio para satisfacer la demanda de energía que crece durante el verano.

Contra esa decisión se 
reunieron firmas ayer y salió a la calle una multitud: 70.000 personas según la Policía y 170.000 según los organizadores. La marcha fue acompañada por escenarios con espectáculos y discursos de artistas e intelectuales, entre ellos el premio Nobel de Literatura Kenza-
buro Oé.