Al Qaeda en el Magreb Islámico llamó ayer a los musulmanes de la región a matar a los diplomáticos estadounidenses. Convocó a responder así a la difusión de la película que muchos consideraron ofensiva y que la Casa Blanca intentó retirar de Youtube, sin éxito. “Animamos a todos los musulmanes a que sigan manifestándose y aumenten sus protestas, y a matar a embajadores y representantes o a expulsarlos para limpiar nuestra tierra de su maldad”, dice un comunicado del grupo armado citado por CNN.

Doce personas murieron ayer en Kabul, entre ellas ocho sudafricanos, en un atentado cometido en respuesta a la difusión de La inocencia de los musulmanes, según indicó el grupo insurgente afgano Hezb-e-Islami, que reivindicó el ataque.

Cerca de 4.000 personas se manifestaron ayer en Afganistán pidiendo “muerte a Estados Unidos” y prendiendo fuego tanto a banderas de ese país como a autos y comercios. Antes de la llegada de los manifestantes, varias embajadas y otras oficinas estadounidenses en Kabul fueron cerradas. Por eso se convirtieron en objetivos los complejos de viviendas para trabajadores extranjeros, ubicados en las cercanías de las sedes diplomáticas, que recibieron impactos de piedras y otros objetos.

También estuvo cerrada ayer la embajada de Estados Unidos en Tailandia debido a la convocatoria de una protesta que reunió a casi 500 personas. Escenas similares se produjeron durante el fin de semana en estos lugares y en otros tan dispares como India, Australia, Azerbaiyán y el Reino Unido, donde el sábado hubo una protesta contra la película que incluyó la quema de la bandera estadounidense.

Ya el viernes las autoridades de Washington habían previsto una masificación de las protestas -muchas habían sido convocadas para después de la hora del rezo, el viernes- y repatrió a la mayoría de los funcionarios de las embajadas, en las que dejó sólo al personal indispensable, además de enviar a varios países grupos de marines para reforzar la seguridad de sus sedes diplomáticas y de sus ciudadanos.

En Pakistán la Policía dispersó con tiros al aire y gases lacrimógenos a los manifestantes que marchaban hacia el consulado estadounidense en Karachi, y también hubo protestas en la ciudad de Lahore, donde fueron apedreados policías que protegían el consulado de Estados Unidos. En Indonesia hubo quema de banderas y gritos de “muerte a Estados Unidos” ante la embajada, hasta que la Policía dispersó la protesta de cientos de personas.

La manifestación en Beirut tuvo la particularidad de que participó, sin anunciarlo, el líder del movimiento Hezbolá, Hasan Nasralá, un ícono del mundo árabe e islámico que desde 2006 permanecía escondido por temor a que lo asesinaran. “Los que insulten al profeta Mahoma sufrirán un castigo divino”, advirtió Nasralá ante decenas de miles de libaneses, para luego agregar: “El mundo debería saber que nuestra ira no será un enojo pasajero, sino el comienzo de un movimiento serio que continuará en la nación musulmana para defender al profeta de Alá”. Días antes, en un discurso televisado, el líder musulmán había pedido a Estados Unidos en nombre de “el mundo islámico” que impidiera la emisión de la película y juzgara a “aquellos que han ofendido a los musulmanes”.

Por su parte, el gobierno iraní condenó el video “inapropiado y ofensivo” y se comprometió “a buscar, localizar y perseguir al culpable [...] quien ha insultado a 1.500 millones de musulmanes en todo el mundo”, según palabras del primer vicepresidente, Mohammad Reza Rahimi.

La identidad del responsable de la película todavía se desconoce, desde que personas relacionadas a la producción dijeran que la persona que se identificó como el productor bajo el nombre de Sam Bacile probablemente utiliza un seudónimo.

Otro de los nombres que circularon como presunto responsable del video fue el de Nakoula Basseley Nakoula, un cristiano copto que reside en Estados Unidos y está condenado por fraude bancario. Nakoula fue interrogado el sábado por las autoridades estadounidenses, que buscaban saber si violó las condiciones de su libertad, que establecían que no podía usar computadoras ni internet. Él negó su participación en la película, sin embargo está incluido en una lista -que Egipto dio a conocer ayer- de personas que serán enjuiciadas por insultar al Islam; allí figura como Ellia Basseley y el fiscal dijo que Nakoula es un alias.

La lista que elaboró Egipto es completada por otros seis cristianos coptos, entre ellos el activista Morris Sadeq y el pastor estadounidense Terry Jones, quienes promocionaron la película. El fiscal de la causa indicó que los acusados podrían ser condenados a muerte y manifestó confianza en que los cristianos coptos sometidos a juicio sean extraditados por sus países de residencia.

Como para asegurar que la situación no se calmará en los próximos días, un grupo de ultraderecha e islamófobo alemán, el Pro Deuschland, anunció que difundirá el video en su país, lo que generó la reacción del gobierno, que desde el Ministerio del Interior advirtió que “ni el derecho a la libertad de expresión ni a la libertad artística son ilimitados”.

Además, como para sumarse a las reacciones, el semanario satírico francés Charlie Hebdo anunció que en su edición de hoy publicará viñetas y caricaturas de Mahoma, entre ellas, algunas en las que aparece en “posturas particularmente atrevidas”.