“Paraguay está con absoluta disposición a reintegrarse al Mercosur y la Unasur”, dijo ayer Horacio Cartes, en una conferencia de prensa para periodistas extranjeros. A lo largo del encuentro se le preguntó varias veces qué pasos seguirá su país respecto del Mercosur (ver http://ladiaria.com.uy/ACIP), pero el presidente electo evitó las respuestas.

Cartes fue consultado acerca de si una vez en el gobierno, se reuniría con la bancada de su Partido Colorado para pedirle que votara el ingreso de Venezuela al Mercosur, a sabiendas de que si el Parlamento paraguayo no aprueba ese ingreso no es posible una inserción de su país en el bloque. El presidente electo respondió que Paraguay tiene altos índices de desempleo y que con esa situación los parlamentarios “no pueden impedir que haya industrias que puedan ofrecer empleo”. Dijo que la participación de su país en el bloque implica varias ventajas, entre ellas la presencia de empresas brasileñas.

“El atractivo de estar en el Mercosur es demasiado importante, es trabajo para nuestra gente, es oferta laboral […]. No hacer el esfuerzo para que estemos integrados como bloque sería un gran contrasentido”, agregó, antes de señalar que la prioridad es Paraguay, no las posiciones ideológicas. “Las soluciones las tenemos, sólo exigen que [...] nos sentemos a hablar”, concluyó.

En la conferencia de prensa Cartes declinó por motivos formales la invitación del presidente uruguayo, José Mujica, a asistir a la cumbre del Mercosur del 28 de junio, en Montevideo. Alegó que todavía no será el presidente en ejercicio y sugirió que debería asistir el actual gobernante, Federico Franco. “Agradezco la invitación, pero antes de asumir soy apenas un presidente electo que adquirirá sus derechos el 15 de agosto. Corresponde al presidente Franco, si quiere, asistir a esa cumbre”, manifestó.

Acerca de la región, también señaló que al conversar ayer con la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, le pidió a ésta que lo ayude a llevar adelante en Paraguay algunos proyectos que los gobiernos del Partido de los Trabajadores han aplicado en Brasil, como el plan Hambre Cero.

También hubo lugar para las críticas al Partido Colorado, que Cartes suele exponer para señalar que él hará un gobierno diferente. “Tras estar tantos años en el poder, 61 años, [el Partido Colorado] se sintió invencible y dejó de ver sus propios errores, olvidó su propia doctrina. No priorizó que lo principal de este partido es la gente, y [en particular] la gente humilde, y en las últimas dos décadas yo diría que fue bastante olvidado que esto era lo principal”, dijo.

“Tenemos que hacer una gran gestión si queremos que el partido se mantenga en el poder. Ya no van a ser simplemente nuestros cánticos, nuestras lindas polcas ni nuestras banderas de estrellas blancas. Estamos exigidos a dar respuesta a la gente si queremos que nos vuelvan a elegir”. Por eso, agregó que hará su mayor esfuerzo “para hacer de una vez por todas un gobierno para el pueblo y no, como dice la gente, que después de las elecciones los beneficios sean para unas pocas personas”.