Las elecciones internas previstas para el domingo, obligatorias para todos los partidos que quieran participar en la contienda electoral y para todos los electores, son para definir los candidatos para los comicios parciales legislativos del 27 de octubre.
Las PASO (Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias) surgen de una reforma política aprobada en 2009, año en el que habían competido en las elecciones alrededor de 700 partidos. Se estableció esta instancia para servir de filtro, dejando afuera a quienes no alcancen el 1,5% de los votos válidos emitidos para el cargo al que se postulan. Además, el estrecho margen que hay entre las primarias y las elecciones en sí (poco más de dos meses), hace que la mayoría de los partidos hagan sus alianzas antes de las PASO, por lo que sirven sobre todo para dar una idea de cómo viene el juego de fuerzas de cara a octubre, que es en definitiva la instancia que importa. En los pocos casos en que hay competencia entre distintos candidatos a legisladores de una misma alianza o partido, a nivel nacional en Senadores quedará la lista más votada, pero en Diputados, la lista para octubre se define en función de la cantidad de votos que reciba cada candidato.
Grandes rasgos
En octubre, a nivel nacional, se elegirán 24 senadores (un tercio de los 72 que integran la cámara alta) y 127 diputados (la mitad del total de 257 que conforman la cámara baja), para sustituir o renovar los legisladores cuyo mandato termina en diciembre. Además de elegir los candidatos a gobernador en Corrientes y en Santiago del Estero, también se eligen cargos en las legislaturas de 13 provincias, lo que representa un conjunto de 323 diputados y 73 senadores provinciales.
Una novedad en las PASO del domingo es que van a poder votar, de manera voluntaria, gracias a la ley conocida como Voto Joven promulgada en noviembre, los argentinos que cumplen 16 años antes del 27 de octubre. La Cámara Nacional Electoral informó que 30,5 millones de personas están convocadas a votar en todo el país. El distrito electoral con más peso, porque representa 37% del padrón argentino, es la provincia de Buenos Aires y sus 11,3 millones de votantes. A nivel nacional, en ese distrito sólo se eligen 35 diputados y ningún senador. Cada una de las diez alianzas y partidos que participan presenta una o varias listas. Tres sondeos publicados el domingo predicen, con leves variantes, una victoria del ex kirchnerista ahora opositor Sergio Massa (Frente Renovador) que obtendría una victoria ajustada ante el oficialista Martín Insaurralde (Frente para la Victoria), que acortó muchísimo su desventaja.
La provincia de Córdoba, con sus 2,6 millones de votantes, es el segundo distrito de peso y representa el 8,67% de los votantes argentinos. Ahí se eligen nueve diputados nacionales y se presentan 11 fuerzas. Las encuestas arrojaban el domingo una victoria de Unión por Córdoba y sus dos listas, presentadas por el gobernador José Manuel de la Sota. La Unión Cívica Radical le estaría pisando los talones y el kirchnerismo llegaría tercero. El siguiente distrito en peso electoral es la provincia de Santa Fe, con 2.552.338 votantes, en donde compiten ocho alianzas o partidos para nueve cargos de diputados. Ahí, sin mucha sorpresa ganaría el Frente Progresista, Cívico y Social, que presenta dos listas en su feudo, dejando al oficialismo en segundo lugar. La ciudad de Buenos Aires es el cuarto distrito en importancia a nivel nacional, con 2.541.078 electores que deberán elegir entre 13 agrupaciones y sus listas, para renovar en octubre tres cargos de senadores y 13 de diputados. Ahí también, el partido del jefe de gobierno local, Propuesta Republicana, es el que lidera la mayoría de las encuestas, con el Frente para la Victoria en segundo lugar; y Unen (Coalición Cívica-ARI, Proyecto Sur, UCR, Partido Socialista, Libres del Sur, Socialismo Auténtico y frente Popular Democrático y Social) en el tercero.
A pesar de estar bastante mal parado en los distritos principales y de que las consultas muestran que aún hay muchos indecisos, las encuestadoras auguran un crecimiento del oficialismo a nivel nacional.