Ariel Arcos, Enrique Pagardoy y Juan Povaschuk fueron detenidos por carabineros chilenos en setiembre de 1973, cuando pretendían cruzar la frontera con Argentina, poco después del golpe de Estado. Ayer tuvieron lugar los alegatos finales de la apelación de segunda instancia por su desaparición, en presencia del embajador uruguayo en Chile, Rodolfo Camarosano.

Fueron detenidos junto a dos mujeres y un hombre, también uruguayos. Los testimonios indican que fueron entregados al Ejército y que estuvieron detenidos en el Regimiento Ferrocarrileros Nº 7, de Puente Alto. Debían partir, junto con sus otros compañeros uruguayos, al Estadio Nacional, pero un militar dio la orden de que ellos tres se quedaran en el regimiento y nunca más se supo de ellos.

Ayer la diaria asistió en Santiago a la audiencia por esa causa, en la que un militar, Mateo Durruty Blanco, entonces comandante del regimiento, fue condenado en primera instancia. Los otros cinco acusados, todos militares, fueron absueltos. Ayer los abogados de ambas partes expusieron sus argumentos finales, y se espera la sentencia.

Los defensores de la causa de los uruguayos creen que hay elementos suficientes para revertir las absoluciones; si no se logra, recurrirán a la Corte Suprema. Uno de ellos, Cristián Cruz, destacó la presencia del embajador de Uruguay durante la audiencia, porque desde 2010 no había concurrido ninguno a estos procesos en Chile, en los que los familiares de las víctimas suelen estar lejos, no tienen recursos o no se manifiestan. Camarosano, que llegó a Chile hace un mes, destaca que los derechos humanos son para él “una prioridad”.

la diaria también supo que hay novedades en la causa de otros dos de los nueve desaparecidos en Chile: testigos aseguran haber visto a Juan Cendán y Alberto Fontela en centros de detención antes de su desaparición. La causa, que permanece en etapa de investigación, deberá reactivarse y quedó en manos del juez Mario Carroza, que actuó en juicios emblemáticos en derechos humanos. El 25 de setiembre (la fecha se modificó para que los familiares puedan estar) se va a colocar una placa en la Embajada de Uruguay en Santiago, en homenaje a los nueve desaparecidos en Chile.