Israel llamó a consultas a su embajador en Estocolmo en rechazo a la decisión de Suecia de reconocer el Estado de Palestina. “Suecia debe entender que las relaciones en Medio Oriente son mucho más complejas que un paquete de muebles de Ikea, y haría bien en actuar con sensibilidad y responsabilidad”, dijo el canciller Avigdor Lieberman en un comunicado citado por la agencia Efe. En su opinión, “el único modo de conseguir un pacto entre Israel y los palestinos es que las partes lleven a cabo negociaciones sinceras”. Según informó el diario israelí Haaretz, el embajador seguirá en Israel hasta nuevo aviso, y el gobierno evalúa incluso la posibilidad de retirarlo de manera permanente.

En cambio, dirigentes palestinos celebraron la decisión de Suecia. “Es un mensaje a Israel y es una respuesta a su continua ocupación de tierra palestina”, dijo Nabeel Abu Rdeineh, portavoz del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, informó la agencia Reuters.

“El primer paso para salvar la solución de dos estados es, efectivamente, reconocer dos estados, no sólo uno”, dijo el ex negociador palestino Saeb Erekat en una columna de opinión que publicó en Haaretz. Consideró que la política de no reconocer a Palestina convierte “el derecho de autodeterminación [de los palestinos] en una decisión israelí”.

La ministra de Relaciones Exteriores de Suecia, Margot Wallström, dijo que la decisión se tomó porque en este caso “se cumplen los criterios del derecho internacional para reconocer estados: hay un territorio, una población y un gobierno”, pero además se consideró como un “acto de responsabilidad” para impulsar la paz en la región. “Durante el último año hemos visto cómo las conversaciones de paz se estancaron, cómo las decisiones sobre nuevos asentamientos en tierra palestina ocupada complicaron la solución de dos estados y cómo la violencia ha regresado a Gaza”, agregó la ministra, que recordó que otros 134 países ya reconocieron el Estado de Palestina. Uno de ellos es Uruguay. Pero Suecia es el primer miembro de la Unión Europea en tomar esta decisión (algunos países de Europa del Este la tomaron antes de ingresar al bloque).