El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi lanzó ayer la campaña de su partido, Forza Italia, para las elecciones europeas de mayo con el lema “Más Italia, menos Alemania” y con un dardo contra el presidente del Parlamento Europeo, el alemán Martin Schulz, quien preside el Partido Socialista Europeo. El dirigente recordó que en 2003 había dicho que Schulz podría hacer el papel de vigilante de un campo de concentración en una película de nazis, y agregó: “Pero, por Dios, para los alemanes los campos de concentración nunca existieron”.

Los principales sectores políticos alemanes reaccionaron ante sus declaraciones. Peter Tauber, secretario general de la gobernante Unión Cristianodemócrata, aliada de Forza Italia en las elecciones europeas, opinó que sus expresiones fueron “tan absurdas que no merecen comentarios”. El propio Schulz consideró “indignante” que Forza Italia utilice “consignas antigermanas” cuando está aliado a un partido alemán, y el Partido Socialista Europeo exigió a los aliados de Forza Italia en todo el continente que condenen las declaraciones de Berlusconi.

Por su parte, el Partido Social Demócrata, que participa en la alianza de gobierno, exigió a la canciller alemana, Angela Merkel, que responda de manera contundente.