Israel bombardeó ayer la casa de Ismail Haniye, el ex primer ministro del gobierno del movimiento palestino Hamas en Gaza, en medio de un campamento de refugiados, según la Policía palestina citada por la agencia Efe. Además, los ataques israelíes destruyeron la única planta eléctrica de la franja, y 90% de la población quedó sin suministro de energía, de acuerdo con el director de esa central, Mohamed al Sharif.

El gobierno de Israel asegura que los ataques no se detendrán hasta haber destruido todos los túneles que los milicianos de Hamas cavaron y que pretenden usar para atacar a Israel. El aumento de la ofensiva podría deberse a la muerte, el lunes, de diez soldados de Tzahal en enfrentamientos armados. “No hay guerra más justificada que ésta”, aseguró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en un mensaje emitido por televisión.

En tanto, las negociaciones por un cese de las hostilidades no parecen avanzar. El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que encabeza los esfuerzos de su país por alcanzar una resolución negociada en este conflicto, quedó en el centro de una controversia con Israel y ha sido criticado en la prensa de ese país por su insistencia en lograr un alto el fuego y por querer involucrar en las negociaciones a Qatar y Turquía, países a los que Israel considera aliados de Hamas.

“Pasé 29 años en el Senado estadounidense y tengo un historial de voto de 100% a favor de Israel”, se defendió Kerry en una conferencia de prensa. Aseguró además que Netanyahu le pidió por teléfono buscar un cese del fuego. Netanyahu “ha dicho de forma consistente que abrazaría un alto el fuego que permita a Israel protegerse de los túneles” y que no le resulte desventajoso tras “el gran sacrificio que ha hecho hasta ahora para protegerse”, dijo Kerry. Agregó que cree que ese compromiso con la búsqueda de un final de las hostilidades es sincero. Lo contrario, continuó, implicaría que alguien “está jugando un juego diferente”, y agregó: “Espero que ése no sea el caso”.

En tanto, el líder supremo iraní, Alí Jamenei, pidió “al mundo islámico [...] armar a Gaza y al pueblo palestino” para poner fin al “genocidio” que sufre por parte de Israel, Estado al que llamó “perro rabioso”.

Sin embargo, según declaraciones de altos funcionarios israelíes que hablan con la prensa de su país a condición de no ser identificados, Israel está interesado en que fuerzas internacionales colaboren en el desarme de la Franja de Gaza. De acuerdo con la agencia de noticias Efe, esto implicaría un cambio radical, ya que ese Estado hasta ahora sólo aceptaba contar con sus propias fuerzas armadas para velar por su seguridad.

Allegados a Netanyahu dijeron a la prensa que están dispuestos a involucrar a países occidentales y árabes moderados (como Egipto y Jordania) para resolver la situación en Gaza. “El primer ministro quiere establecer un marco internacional para la desmilitarización de Gaza, que supervise la entrada de gente y bienes al enclave y que evite el contrabando [de armas]”, dijo ayer al diario israelí Haaretz una “alta fuente del gobierno”.

Según estas informaciones, el Consejo de Ministros está estudiando la posibilidad de levantar el bloqueo impuesto a Gaza desde 2007, una vez concluida la operación armada lanzada el 8 de julio. El bloqueo se ha mantenido con mayor o menor intensidad en función de las circunstancias. El objetivo de esa medida, que generó cuestionamientos en ámbitos internacionales, es impedir que Hamas y otras milicias armadas introduzcan armas en la franja. Pero los israelíes consideran cada vez más que la capacidad que Hamas está demostrando en estos días, en los que murieron cerca de 50 soldados de Israel y fueron lanzados unos 2.500 cohetes contra ese país, muestra que el bloqueo no cumple su objetivo.

Al inicio de la jornada de ayer, el secretario del Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina dijo que tres facciones armadas palestinas, entre ella Hamas, habían aceptado un alto el fuego. Sin embargo, horas después, Hamas desmintió el anuncio. “La declaración de Abed Rabo acerca de que Hamas ha aceptado un alto el fuego de 24 horas no es cierta y no refleja la postura de la resistencia”, dijo el vocero de esa organización islamista armada, Abu Zuhri, en un mensaje a los medios. “Consideraremos un alto el fuego cuando Israel se comprometa también y tengamos garantías internacionales”, agregó.