Habló Cristina

"AMIA. Otra vez: tragedia, confusión, mentira e interrogantes". Así se titula una extensa carta sobre la muerte del fiscal Nisman que publicó anoche la presidenta Cristina Fernández en su cuenta de Facebook. Repasa toda la actuación gubernamental en la causa judicial, menciona a todos los imputados y plantea una serie de preguntas relacionadas a Nisman. "¿Quién fue el que ordenó volver al país al fiscal Nisman el día 12 de Enero, dejando inclusive a su pequeña hija sola en el aeropuerto de Barajas, interrumpiendo vacaciones familiares y licencia en el trabajo que habían comenzado el 1º de enero y debían finalizar más allá del 20", se pregunta la mandataria.

Luego cuestiona tres tapas consecutivas del diario Clarín y plantea que el Poder Judicial debería investigar por qué un empleado de la fiscalía le suministró el sábado a Nisman un arma calibre .22 que le provocó la muerte. "¿Para defensa? ¿Un arma calibre 22? Cuando el fiscal vivía en la Torre Le Parc de Puerto Madero, con sistemas de vigilancia inteligentes, con códigos de ingreso, monitoreo de cámaras y custodia constante de Prefectura, y contaba además con custodia propia de 10agentes de la Policía Federal", continuó Fernández. El texto completo de la carta puede verse en www.ladiaria.com.uy/UG9

“Esto fue desde el gobierno o en contra del gobierno”, dijo ayer el político y periodista Jorge Asís. Sus palabras reflejan algunas de las teorías conspirativas que ayer circularon en Argentina, especialmeznte en las redes sociales, sobre la muerte de Nisman.

El cuerpo del encargado de la Unidad Fiscal de la Causa AMIA fue encontrado en la madrugada de ayer en su apartamento ubicado en la zona de Puerto Madero, junto a un arma calibre 22 y un casquillo. La autopsia confirmó que el disparo se había efectuado en la sien. “El decano de la morgue judicial le comunicó a la representante del Ministerio Público [la fiscal de la causa, Viviana Fein] que en la muerte de Nisman no hubo intervención de terceras personas”, según indicó un comunicado de la Fiscalía. En declaraciones a la prensa, la fiscal Fein declaró “que de acuerdo a la autopsia, el fiscal Nisman se disparó. No hay margen de dudas”, aunque también dijo que “se va a investigar si hubo algún tipo de inducción o instigación al suicidio”. En el apartamento de Nisman no se encontraron señales de forcejeo ni desorden, y al cierre de esta edición estaba pendiente el resultado de un análisis para determinar si Nisman tenía residuos de pólvora en sus manos. El fiscal había recibido amenazas y su casa era custodiada por 12 policías para garantizar su seguridad.

Desde el oficialismo y la oposición, así como desde las organizaciones judías en Argentina DAIA (Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas) y AMIA, se manifestó sorpresa y pesar por la muerte de Nisman. Casi ningún dirigente opositor señaló al gobierno como responsable, pero sí se habló de impedir la “impunidad”. Así lo hicieron, entre otros, el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, y el candidato presidencial del Frente Renovador, Sergio Massa.

Encuentro frustrado

Nisman iba a participar ayer en una reunión de la comisión de Legislación Penal de la Cámara de Diputados para presentar las presuntas pruebas que respaldaban su denuncia contra la presidenta Cristina Fernández y el canciller Héctor Timerman (ver recuadro). En la previa de ese encuentro el oficialismo aseguraba que Nisman haría “un papelón” porque no tenía pruebas, mientras que la oposición esperaba con ansias la presentación.

Algunas de las muchas voces que se escucharon ayer en referencia al presunto suicidio de Nisman señalaron como una paradoja que decidiera terminar con su vida justamente antes de hacer esa presentación, para la cual se estaba preparando con mucho esfuerzo, según periodistas argentinos. Otras voces señalan que la cercanía del encuentro podría haber empujado a Nisman a tomar esta decisión si no contaba con las pruebas suficientes para respaldar sus denuncias. Algunos de los más osados aseguraban que el núcleo duro, más veterano, de la Secretaría de Inteligencia habría impulsado a Nisman a presentar la denuncia y finalmente lo habría dejado solo, sin darle siquiera las grabaciones de las escuchas.

Pese a la muerte de Nisman la reunión se llevó a cabo en el Congreso. Sin la presencia de diputados kirchneristas, la comisión de Legislación Penal de la cámara baja emitió un comunicado en el que pide que se preserve la seguridad del equipo que trabajaba con Nisman y de las pruebas que éste había recabado, que se investigue la muerte del fiscal, que se continúe con su investigación sobre el atentado a la AMIA y que se designe para sustituirlo a alguien que “reúna los requisitos de idoneidad, independencia [y] ética”.

Al menos hasta fines de enero, el fiscal Alberto Gentili será el nuevo líder de la Unidad Fiscal AMIA en sustitución de Nisman. Gentili había sido recomendado por Nisman para cubrir su ausencia cuando estuvo de vacaciones y era de “confianza” del fiscal fallecido.

Las denuncias presentadas por Nisman contra la presidenta y otros integrantes y simpatizantes del gobierno serán investigadas por el juez federal Ariel Lijo, quien adelantó dos semanas su regreso de las vacaciones para encargarse de este tema.

Fuentes judiciales aseguraron a Clarín que las pruebas que había recabado Nisman -en el caso AMIA y en su denuncia contra integrantes y simpatizantes del gobierno- están guardadas en una caja de seguridad de la sede judicial argentina.