Las polémicas declaraciones tuvieron lugar horas antes de que Netanyahu viajara a Alemania. “Hitler no quería exterminar a los judíos en aquel momento [noviembre de 1941], quería expulsarlos”, dijo el primer ministro, haciendo referencia al famoso encuentro en Berlín entre Al Huseini y Hitler. Según el relato del primer ministro israelí, el muftí le dijo a Hitler: “Si expulsa a los judíos, todos ellos vendrán aquí [a Palestina]”. “Entonces, ¿qué debo hacer con ellos?”, le replicó Hitler. A lo que, según Netanyahu, el líder palestino respondió: “Quemarlos”.

Rápidamente, historiadores y políticos de la oposición cuestionaron y rechazaron los dichos del gobernante israelí y consideraron que responsabilizar a los palestinos por el Holocausto judío implica coquetear con el negacionismo. “Al Huseini se encontró con Hitler en 1941, pero por supuesto que no fue él quien inventó la Solución Final”, dijo a la radio militar de Israel el ministro de Defensa, Moshé Yaalón, que además recordó que la persecución nazi comenzó unos años antes. El líder de la oposición israelí, Isaac Herzog, señaló que las palabras de Netanyahu suponen “una peligrosa distorsión de la historia”, y exigió una rectificación para evitar la “trivialización del Holocausto y el auge del negacionismo”. El diputado Itzik Shmuli, también opositor, exigió al primer ministro que se disculpe “personalmente” ante los sobrevivientes del Holocausto. “El jefe del gobierno de Israel, al servicio de los negacionistas del Holocausto; eso sí que no lo habíamos visto hasta ahora. No es la primera vez que Netanyahu deforma los hechos históricos, pero una mentira de esta envergadura es algo nuevo”, dijo Shmuli al diario israelí Yedioth Aharonot.

Otros especialistas en el Holocausto judío también manifestaron su opinión. El profesor Dan Michan, director del Instituto para la Investigación del Holocausto en la Universidad de Bar Ilan, precisó al mismo diario que esa reunión entre Hitler y Al Huseini se produjo cuando el plan de exterminio de los judíos ya había comenzado; mientras que la directora del Museo del Holocausto, la historiadora Dina Porta, aseguró que las afirmaciones de Netanyahu son “factualmente incorrectas”.

Netanyahu hizo estas declaraciones en medio de una oleada de violencia que produjo la muerte de una cincuentena de personas en Israel y Palestina desde principios de mes. En un comunicado de la Organización para la Liberación de Palestina publicado ayer, el secretario general Saeb Erekat expresó que “es un día triste para la historia” cuando “el líder del gobierno israelí odia tanto a su vecino que está dispuesto a absolver al criminal de guerra más infame de la historia, Adolf Hitler, del asesinato de seis millones de judíos”. El texto agrega: “En nombre de los miles de palestinos que lucharon junto a las tropas aliadas en defensa de la justicia internacional, el Estado de Palestina denuncia estas declaraciones moralmente indefendibles e incendiarias”.

Tras la dimensión que tomó su discurso y minutos antes de subir al avión que lo llevaría a Alemania, Netanyahu respondió a las críticas. “No quise decir que absolvía a Hitler de su responsabilidad, sino que el fundador de la nación palestina [Al Huseini] quería destruir a los judíos incluso antes de que existiera la ocupación de territorios”, replicó. Sin embargo, insistió en que, si bien “el responsable de la solución final y quien tomó la decisión” de iniciar la masacre fue Hitler, el líder palestino lo “incitó”.