Estados Unidos impuso restricciones de visado a funcionarios y ex funcionarios del gobierno venezolano a los que acusa de estar involucrados en abusos a los derechos humanos o actos de corrupción. En el comunicado del Departamento de Estado no se dan a conocer las identidades de las personas incluidas en las restricciones, pero sí se señala que éstas abarcarán también a sus familiares directos.

Las nuevas restricciones se conocen después de que durante el fin de semana el presidente venezolano, Nicolás Maduro, acusara al vicepresidente estadounidense, Joe Biden, de estar detrás de un plan para derrocarlo. Maduro aseguró que Biden habló con “presidentes y primeros ministros” de países caribeños para “anunciar el derrocamiento” de su gobierno durante un encuentro sobre ayudas energéticas que se realizó hace unos días.

“Se ha puesto en marcha un plan para un golpe de Estado cruento”, aseguró Maduro el domingo, al reiterar la denuncia que había hecho el viernes. Aseguró, además, que “todas las agencias de gobierno” de Estados Unidos “están metidas” en este plan en su contra. El Departamento de Estado dijo que estas acusaciones son “infundadas y falsas”.