El gobierno de Paraguay se pronunció ayer acerca de un comunicado en el cual el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) acusa a la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) de haber causado la muerte de una pareja que mantenía como rehén. El Ejecutivo y el grupo armado intercambiaron acusaciones acerca de lo ocurrido con esas personas.

A fines de enero el EPP, un grupo armado que opera en zonas rurales de Paraguay, entró a la casa de una pareja de alemanes y la secuestró junto a otras cuatro personas. Éstas fueron liberadas minutos después y militantes del EPP se internaron en una zona boscosa junto al matrimonio. Las personas liberadas alertaron a las autoridades, que salieron a buscar a los secuestradores y horas después los encontraron.

Entonces se enfrentaron integrantes del EPP y de la FTC, que fue formada por el gobierno de Horacio Cartes para enfrentar a ese grupo armado. Las autoridades aseguraron que al verse rodeados los guerrilleros se asustaron y mataron al matrimonio antes de escapar.

Ese último ataque del EPP despertó críticas de la oposición a la FTC, que reúne a policías y militares y que fue presentada en su momento como un instrumento ideal para combatir al grupo guerrillero. La FTC cuenta con un presupuesto alto y tiene a disposición todo tipo de facilidades brindadas por la Policía y el Ejército. Sin embargo, no ha obtenido resultados claros y ha protagonizado algunas polémicas, en particular al comienzo, cuando se señalaba que policías y militares no practicaban una alianza real y no colaboraban entre ellos.

Además de esas críticas, recibió una acusación emitida en un comunicado del EPP. El grupo acusó a la FTC de haber sido la autora del asesinato de la pareja alemana. El comunicado dice que la FTC -definida como una “fuerza mercenaria del Partido Colorado”, que está en el gobierno-” disparó sobre un comando de elite del EPP que custodiaba” a la pareja de alemanes y que esos disparos “alcanzaron a los prisioneros”. Los integrantes de la FTC “entran en combate disparando contra todo lo que tenga movimiento, no se controlan, enloquecen ante el temor”, afirma el texto.

Además, el EPP acusa a esa fuerza de seguridad de utilizar “proyectiles de fragmentación”, que están prohibidos por la Convención de Ginebra, con los cuales pudo causar la fractura que tenía uno de los rehenes. El EPP aseguró que ellos tienen prohibido maltratar a sus prisioneros. “De eso nuestros ex prisioneros han testimoniado”, recordó.

El comunicado se conoció el sábado, pero recién ayer hubo un pronunciamiento del gobierno. El ministro del Interior, Francisco de Vargas, puso en duda que el comunicado fuera efectivamente del grupo guerrillero. “Generalmente utilizan cuentas en redes sociales” o “comunicaciones vía internet directo a ciertos medios de comunicación”, dijo a Radio Monumental.

Por su parte Sandra Quiñónez, la fiscal que se ha encargado de las causas vinculadas con el EPP, aseguró que la intención del comunicado es generar desconfianza por parte de la población respecto a la FTC. “No debemos darle tanta importancia a lo que dice el grupo terrorista”, dijo.

A estas acusaciones sobre la actuación de la FTC en el caso de los rehenes alemanes se sumó en la última semana la muerte de Alicio Florenciano Vega, un presunto integrante de la Agrupación Campesina Armada (ACA), que apareció muerto con un disparo de escopeta. La FTC informó que no hubo un enfrentamiento con ACA, otro grupo guerrillero, y que no tenía responsabilidad en su muerte. Medios paraguayos atribuyeron la muerte de Vega a un enfrentamiento interno dentro de ACA.