“Estoy convencido: el próximo presidente de la Nación debe ser Daniel Scioli”, dijo el intendente de Lomas de Zamora y ex diputado oficialista Martín Insaurralde, en un comunicado emitido el sábado. Con esta definición terminó con las versiones de que tenía intenciones de irse con el líder del Frente Renovador, Sergio Massa. La expectativa era mayor hace un tiempo, ºcuando Insaurralde era la principal figura kirchnerista y Massa era la promesa opositora. Ahora el líder de Propuesta Republicana, Mauricio Macri, parece haberle quitado ese lugar a Massa.

“Reconozco que he tenido algunas diferencias con él [Scioli] y su equipo por temas puntuales de la gestión de la provincia de Buenos Aires”, agregó Insaurralde. Aclaró que esas “diferencias” son “una tensión lógica y positiva entre un intendente de uno de los municipios más grandes de la provincia y su gobernador”, y saludó la actitud “humilde” y “proactiva” con la que Scioli respondió a sus planteos.

Scioli es uno de los precandidatos presidenciales del gobernante Frente para la Victoria, y además mantiene un buen vínculo con los principales dirigentes opositores, Massa y Macri. Una encuesta publicada ayer por el periódico argentino Perfil atribuye a Scioli una intención de voto de 31%, a Macri de 27,6% y a Massa de 25%.