Medios oficiales sirios mostraron ayer imágenes de un drone estadounidense, que fue derribado por las defensas antiaéreas sirias el martes, día en el que el gobierno presidido por Bashar al Assad había anunciado que había derribado a una “aeronave hostil” estadounidense.

Desde setiembre, los drones estadounidenses recorren el cielo sirio en las zonas dominadas por Estado Islámico (EI). Lo hacen con el objetivo de determinar los mejores objetivos para los bombardeos que hace la coalición internacional que enfrenta a EI. Tanto el vuelo de drones como los bombardeos son aceptados por Siria. En este caso, el vuelo del drone no fue sobre territorio ocupado por EI sino sobre Latakia, una provincia junto a la costa mediterránea, que es uno de los feudos del gobernante Al Assad.

Estados Unidos reconoció ayer que había perdido uno de sus drones en Siria, pero no aclaró en qué zona ni precisó si es el mismo que las autoridades sirias dicen que fue derribado por sus defensas antiaéreas.