Las autoridades de Níger ordenaron a unas 27.000 personas evacuar las islas del lago Chad, fronterizo con Nigeria, donde hubo varios ataques de las milicias islamistas de Boko Haram. En esas islas, donde los milicianos podrían encontrar nuevas fuentes de abastecimiento en comercios y viviendas abandonados, los militares de Nigeria, Níger, Chad y Camerún prevén atacar a Boko Haram, según la radio francesa RFI.

Del otro lado de la frontera, en Nigeria, las autoridades militares avanzan en lo que aseguran que es el último feudo de la organización islamista en el país: la selva de Sambisa. Allí, luego de haber liberado el miércoles a 200 niñas y 93 mujeres, el vocero del Ejército, Chris Olukolade, anunció el fin de semana que otras 234 mujeres y niños secuestrados por el grupo habían sido liberados, lo que sumó un total de 687 personas.

No había indicios de que entre los liberados se encontraran las 200 alumnas del colegio de Chibok que fueron secuestradas hace un año. Aquel secuestro motivó la campaña internacional “Bring back our girls” (Devuelvan a nuestras chicas) en las redes sociales.

El vocero militar había dicho el jueves que las condiciones de detención de estas mujeres y niñas habían sido “severas e inhumanas”, y Amnistía Internacional, que asegura que desde 2009 fueron secuestradas por Boko Haram unas 2.000 mujeres y niñas, informó que algunas de las liberadas contaron que fueron sometidas a trabajo forzado, usadas como esclavas sexuales y como combatientes de primera línea junto a los milicianos.