Estados Unidos se iba a retirar de Afganistán a fines de 2014, pero el año pasado anunció que se quedaría más tiempo, con un número menor de tropas que, aunque tendrían otras funciones, podrían participar en combates contra el Talibán. En marzo dio otro paso atrás y dijo que el gobierno afgano le había pedido que mantuviera el mismo número de tropas, en lugar de reducirlo casi a la mitad, como estaba previsto. Esta misión se mantendrá, en principio, hasta 2016. Ahora es la OTAN la que anuncia que tampoco se va a retirar en la fecha prevista para la finalización de su mandato, a fines de 2016, sino que algunas de sus tropas permanecerán en Afganistán después de ese año.

La misión de la OTAN en Afganistán está encabezada por Estados Unidos. El presidente de ese país, Barack Obama, había anunciado que retiraría de Afganistán todas las tropas involucradas en la operación de la OTAN, pero que mantendría algunas destinadas a tareas de “colaboración” y “asesoramiento” de las fuerzas locales, aunque también podrían participar en enfrentamientos con el Talibán.

En 2013 comenzaron a retirarse los contingentes de la OTAN: el español fue el primero en regresar a su país, y el australiano fue el último, en diciembre de 2014. La OTAN dio por terminada la operación militar que involucraba combates con el Talibán y el entrenamiento de las fuerzas afganas. En enero dio inicio a la operación Apoyo Decidido, que relevó a la anterior y cuenta con unos 12.000 funcionarios -la mayoría de ellos militares-, y que está previsto que continúe hasta 2016.

Ayer el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, informó que se decidió continuar con tropas en Afganistán después de ese año: “Tomamos una decisión que muestra que seguimos comprometidos con Afganistán. Acordamos mantener una presencia en ese país”, dijo. Esta nueva operación, “a diferencia de las anteriores, estará liderada por civiles”, aclaró, aunque contará con “un componente militar”. La misión tendrá el objetivo de “asesorar e instruir a las instituciones de seguridad para ayudarlas a ser autosuficientes”, agregó Stoltenberg, que no dio a conocer los motivos que llevaron a concluir que no será suficiente con la formación que brinde la OTAN hasta diciembre de 2016. Los detalles de la misión se planificarán más adelante. La agencia de noticias Efe informaba ayer que esta nueva misión contará con menos integrantes que la actual.

“Una de las cosas más importantes de esta reunión será definir cómo la OTAN puede conseguir más para luchar contra el terrorismo y EI”, dijo Stoltenberg ayer. La cumbre comenzó centrada en la actividad de EI, que también opera en Afganistán, donde se enfrenta con el Talibán. Este encuentro se desarrolla en Turquía, cuyo canciller, Mevlut Cavusoglu, dijo en la apertura del encuentro que su país era el único en la reunión “cuyos vecinos tienen áreas que ya están dominadas por EI”. Agregó: “Esta situación no es sostenible”.