El yuan volvió a sufrir una devaluación ayer, de 1,62%, un día después de que se devaluara 1,9% frente al dólar, en un cambio en la forma de establecer el valor de la moneda china. Ante las dos bajas sucesivas, el presidente del Banco Popular de China (el banco central del país) dijo a la agencia oficial Xinhua que la fluctuación de la moneda “está bajo control” y que la institución que lidera puede estabilizarla si es necesario. En un comunicado, el banco manifestó que confía en que, “tras un breve período de adaptación”, el valor del yuan quede “en una zona razonablemente estable”.

El martes esa institución cambió la forma en que establece la tasa de referencia del yuan para incorporar “las expectativas del mercado”. Ahora la base de cálculo incluye el valor de cierre del día anterior, la oferta y demanda de 35 entidades financieras seleccionadas y la variación de precios de otras divisas internacionales. La liberalización del tipo de cambio tiene un límite: el valor del yuan puede aumentar o disminuir 2% respecto del cierre de la jornada anterior.

The Wall Street Journal informó que ayer el yuan llegó a devaluarse ese máximo de 2% pero el Banco Popular de China intervino en los mercados para aumentar su valor, con el objetivo de que la caída no fuera tan abrupta. Según fuentes cercanas al gobierno consultadas por la agencia de noticias Reuters, el objetivo de las autoridades chinas es que el yuan se devalúe un total de 10% respecto del valor del lunes, una caída suficiente para impulsar la exportación china.