El presidente catalán en funciones, Artur Mas, dijo en conferencia de prensa que el lunes firmará “a regañadientes” la convocatoria a nuevas elecciones e incluso mencionó el 6 de marzo como fecha tentativa para esa votación. Reconoció un único error cometido por su partido, Convergència Democrática de Catalunya (CDC): “haber confiado en el sentido de país” que tiene otra organización política, Candidatura de Unidad Popular (CUP). El domingo la CUP rechazó de forma definitiva investir como presidente catalán a Mas, que necesita sus votos para seguir en el gobierno. No le bastan los de la coalición Juntos por el Sí, que integran CDC, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), de Oriol Junqueras, y organizaciones sociales independentistas.

Después de la conferencia de Mas, la CUP manifestó que todavía hay “condiciones” para iniciar una legislatura independentista antes del lunes, y reclamó a Juntos por el Sí que haga un “movimiento”. Antes, la número dos del grupo, Anna Gabriel, había sugerido que Mas diera un paso al costado y permitiera que Junqueras fuera el candidato a la presidencia catalana. Anoche Junqueras dijo que Mas es el candidato de Juntos por el Sí pero no descartó de plano la posibilidad de asumir él esa posición. “ERC no pone ninguna condición para llegar a un acuerdo”, dijo después de rezongar a la CUP y a CDC por no alcanzarlo. Otros dirigentes de ERC pidieron ayer que Mas deje su lugar a otro, aunque no sea Junqueras.