El sábado el Partido Colorado (PC) paraguayo inauguró su Convención, en la que participaron más de 1.100 delegados de todo el país. Entre otras cosas, el partido se comprometió a “impulsar las medidas políticas y los mecanismos constitucionales y legales” para que se permita la reelección del presidente, el vicepresidente y los gobernadores de los departamentos, que está prohibida por la Constitución. En su propia resolución el PC dice que este impulso es una señal de respaldo a Horacio Cartes “por su destacada gestión como presidente”.

El sector mayoritario del PC, leal al presidente, impulsaba esta iniciativa e incluso había presentado una enmienda constitucional en el Parlamento para que Cartes pudiera ser candidato. La oposición considera que para habilitar la reelección es necesaria una reforma constitucional, un proceso más lento y complejo.

Además, en la Convención del PC se resolvió que quienes no respalden la reelección -en referencia a los colorados disidentes, que son fuertes en el Senado- serán sancionados. Una de las sanciones consistirá en que aquel dirigente que vote en contra de la reelección no podrá ser candidato por el PC en las próximas elecciones. Cuando se manejaba esta posibilidad, los colorados disidentes presentes en la convención se retiraron.

En la Convención también se instó a Cartes a incorporar al Ejecutivo sólo a personas del partido, en una clara referencia a los ministros del Interior, Francisco de Vargas, y de Hacienda, Santiago Peña. A su turno, Cartes dijo que elegiría a correligionarios para ocupar todos los cargos del gabinete. Después de ese aviso, Peña renunció al Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) al que pertenecía y se afilió al PC. Según los medios paraguayos, De Vargas, también del PLRA, será destituido en estos días.

Lo sucedido en la convención colorada generó críticas del PLRA. “Nos encontramos ante una situación que nos preocupa a todos: un presidente que intenta reeditar prácticas que creíamos superadas”, dijo el presidente del PLRA, Efraín Alegre. “Tenemos un Cartes que quiere ser [el ex dictador Alfredo] Stroessner, cuando la dictadura ya no tiene lugar en Paraguay”, agregó.

El senador del Frente Guasú Hugo Richer criticó que se obligue a los senadores y diputados del PC a respaldar la reelección: “El que no está con Cartes o no acepta su billetera evidentemente es amenazado”, dijo en Twitter, y advirtió: “Estamos ante un peligroso proyecto autoritario”.