Italia volvió a temblar ayer, con el terremoto más potente del país desde 1980, según informó el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología italiano. El sismo se registró temprano en la mañana, a diez kilómetros de profundidad, y tuvo su epicentro entre los municipios de Norcia, Castelsantangelo sul Nera, Preci y Visso, ubicados en el centro de Italia. De acuerdo con los medios italianos, la vibración se sintió en todo el territorio del país.

El jefe de la unidad de Protección Civil que coordina la ayuda en casos de desastres, Fabrizio Curcio, dijo que una veintena de personas resultaron heridas, la mayoría de forma leve, y afirmó que por el momento no se hallaron muertos. Según los medios locales, sólo una mujer resultó herida de gravedad después de lanzarse por la ventana de su casa al sentir el temblor.

Las autoridades aseguraron que el terremoto no causó muertos porque la mayoría de la población de la región había sido evacuada por precaución el miércoles, después de una serie de terremotos de menor magnitud.

Los municipios afectados, además, se encuentran muy cerca de Amatrice y Arquata del Tronto, ciudades devastadas por el sismo que el 24 de agosto dejó 297 muertos.

El terremoto provocó graves daños en la infraestructura, en los edificios y en el patrimonio cultural de la zona. Norcia se llevó la peor parte: de la iglesia de San Benedetto, construida en el siglo XIV, sólo quedó la fachada, y muchos edificios quedaron reducidos a escombros. El portavoz de los Bomberos, Luca Cari, declaró el centro de esta ciudad “zona cero”, reportó a la agencia de noticias Efe.

El primer ministro de Italia, Matteo Renzi, dijo ayer en una conferencia de prensa que el gobierno “reconstruirá todo” lo que se derrumbó durante los recientes temblores. “Las casas, las iglesias y los comercios. Estamos hablando de territorios maravillosos, que hacen de la belleza y la capacidad de acogida algo fundamental”, dijo Renzi desde Roma. “Invertiremos lo que haga falta, y si hace falta más, Europa no escatimará en la reconstrucción de los lugares que son el alma de nuestro país, y si el alma está intranquila, el resto del país se encontrará mal”, agregó.

También dijo que los evacuados -cuya cifra se desconoce por el momento- no serán alojados en carpas, considerando la pronta llegada del invierno, por lo que en las próximas semanas serán llevados a albergues. Hoy se desarrollará una sesión del Consejo de Ministros extraordinaria para tomar las primeras medidas de respuesta a la situación.