El candidato del ultranacionalista y euroescéptico Partido de la Libertad, Norbert Hofer, perdió la repetición de las elecciones presidenciales de Austria frente a Alexander van der Bellen, que se postuló como candidato independiente pero con el respaldo del partido ecologista Los Verdes. Van der Bellen, un profesor universitario y economista de 72 años, recibió 53,3% de los votos frente al 46,7% que logró el candidato de extrema derecha, según informó el canal de televisión público ORF.

Las elecciones tuvieron que ser repetidas después de que Hofer y su partido impugnaron los resultados de las presidenciales de mayo, en las que Van der Bellen ganó por menos de 1%. El Tribunal Constitucional anuló esos comicios y ordenó una repetición porque se registraron irregularidades formales en el recuento del voto por correo, aunque en ningún caso se detectaron manipulaciones.

Esta vez, el ecologista ganó la presidencia por una diferencia mayor. De esta manera, frustró el triunfo del candidato ultranacionalista que se veía posible tras el brexit en el Reino Unido y la victoria de Donald Trump en Estados Unidos. Además, puso un freno al avance de la extrema derecha en Europa, meses antes de las elecciones en Francia, Alemania y Holanda de 2017.

Aunque el cargo de presidente en Austria es más bien protocolar, sí tiene la potestad de decidir a quién le encarga la formación del gobierno. Durante la campaña, Van der Bellen aseguró que, si ganaba, haría todo lo posible para que esa responsabilidad no estuviera en manos del partido de Hofer.

“Los resultados de estas elecciones son una señal de que mis posiciones pro europeas son compartidas por la mayoría de los votantes”, dijo ayer el ecologista en declaraciones a ORF, después de conocer los resultados. En su opinión, su victoria envía la “buena señal” de que se “pueden ganar unas elecciones con un mensaje pro europeo”. Después, siguiendo con la retórica europeísta que mantuvo durante la campaña para diferenciarse del mensaje nacionalista y xenófobo de su rival, agregó: “Es del mayor interés para Austria, para los trabajadores, ser un miembro de la Unión Europea. Un miembro importante y que coopera de forma positiva”. Además, prometió que su prioridad será “atender las preocupaciones y miedos” de todos los austríacos, incluso de quienes no lo votaron, en materia de desempleo y seguridad social.

Un rato antes, Hofer reconocía su derrota en una publicación en Facebook. “Estoy infinitamente triste de que no haya funcionado esta vez. Me hubiese encantado cuidar de nuestra Austria”, manifestó. Además, felicitó a su oponente y pidió a los austríacos “que sigan unidos y trabajen juntos”, más allá del resultado en las urnas. Después, entrevistado por ORF, Hofer anunció que se volverá a postular a la presidencia en las elecciones de 2022, para no defraudar a los “muchos votantes” que lo apoyaron.

En tanto, el presidente del Partido de la Libertad, Heinz-Christian Strache, aseguró que hubo “una campaña masiva del sistema” en contra de su candidato. “El miedo a Hofer, que era el candidato del cambio, tuvo su resultado”, dijo en declaraciones a ORF. Strache agregó que su partido tuvo “el mejor resultado de su historia” y aclaró que esta vez no impugnará los resultados.

A pesar del revés de ayer, el partido ultranacionalista lidera todas las encuestas de intención de voto para las próximas elecciones generales, previstas para 2018.