El ex presidente de Chad Hissène Habré (1982-1990) fue condenado a cadena perpetua por crímenes contra la humanidad, violación, esclavitud forzada y secuestro. El juicio tuvo lugar el lunes en Senegal y se trató de la primera vez que un ex mandatario africano fue juzgado por crímenes de guerra o contra la humanidad por jueces africanos y no por magistrados extranjeros enviados por organismos internacionales. El tribunal senegalés aplicó los principios de la Justicia Universal para juzgar a Habré. Después de ser derrocado en 1990, el dictador huyó a Senegal con millones de dólares.

Al igual que en otras instancias del juicio, después de la lectura del fallo Habré cuestionó a los gritos a quienes lo juzgaban y criticó el “neocolonialismo” que “golpea” África, informaron el diario español El País y Radio Francia Internacional. El fallo fue leído por el juez Gberdao Gustave Kam y motivó gritos de alegría entre quienes estaban en el tribunal. La mayoría de los presentes eran familiares de las víctimas del duro sistema de represión desplegado por Habré entre 1982 y 1990, que primero fue dirigido contra la oposición y después contra las etnias hadjarai y zaghawa y las comunidades del sur del país, a las que acusó de apoyar a quienes se rebelaban en su contra. Se estima que durante el gobierno de Habré 40.000 personas fueron asesinadas.