La oposición venezolana superó las más de 200.000 firmas requeridas por el Poder Electoral -equivalentes a 1% del padrón- y demostró que tiene el respaldo necesario para promover un referéndum revocatorio del mandato de Maduro, al menos en esta primera etapa. Así lo informó el lunes la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, en una breve declaración ante la prensa, sin aceptar preguntas. Además, anunció que solicitó al Ministerio Público que investigue las “irregularidades relativas a la posible usurpación de identidad cometida por algunos ciudadanos”. La funcionaria dijo que, de acuerdo con los números oficiales, las irregularidades representan 0,33% de las más de 400.000 firmas recolectadas por quienes quieren que Maduro abandone el poder. Esto significa que las huellas dactilares de 1.326 personas no coincidieron con los datos de quienes se registraron.

La MUD tenía plazo hasta ayer para solicitar formalmente al Poder Electoral que fije una fecha para la segunda fase, que consiste en la recolección de firmas de 20% de los inscritos en el registro electoral, es decir, unos cuatro millones de votantes. A partir de ese momento el CNE tiene 15 días para responder y finalmente activar la segunda recolección de firmas, que la oposición prevé para principios de setiembre. Por otro lado, el secretario de la MUD, Jesús Torrealba, pidió ayer al Poder Electoral que habilite 14.500 centros en todo el país para recoger las firmas necesarias. “La única forma de que todos los convocados tengan la posibilidad de expresar voluntad es que esté desplegada la plataforma tecnológica que se utiliza normalmente en una elección nacional: unas 40.000 máquinas distribuidas en 14.500 centros de votación”, dijo Torrealba a la prensa. “Nosotros vamos a pelear no sólo por el 20%, también vamos a pelear por las condiciones de ese 20%”, agregó.

El líder opositor Henrique Capriles celebró el anuncio de las autoridades electorales, que la MUD espera desde abril, y llamó a movilizaciones en todo el país, hoy y mañana, “por el 20%”.

El oficialismo, en tanto, insiste en que la oposición cometió fraude y presentó una denuncia al respecto. “Ya podemos decir, a estas alturas, que el revocatorio está completamente muerto, muerto en la calle, y herido de muerte, herido de muerte porque se sustenta en un gigantesco fraude”, dijo el lunes Jorge Rodríguez, jefe de la comisión presidencial creada por Maduro para supervisar la solicitud de revocatorio. Rodríguez aseguró que “existen más de 8.600 demandas de tribunales en los 23 estados del país que, sin duda alguna, fueron introducidas por ciudadanos y ciudadanas en cada una de esas ciudades”, para manifestarse contra la solicitud de revocatorio. La denuncia del chavismo, presentada ante el Poder Electoral y el Poder Judicial, reclama no sólo la ilegalidad de la solicitud de la consulta, sino también la cancelación de la MUD como organización política. Si esto sucediera, la propuesta del revocatorio quedaría en el aire.

Por su parte, el rector principal del CNE, Luis Emilio Rondón, dijo que las investigaciones por irregularidades no frenarán el proceso, ya que el Ministerio Público analizará “casos particulares”, entre los cuales citó el uso de datos de personas fallecidas, y establecerá “responsabilidades individuales”.