Comenzó ayer en Turquía el juicio a 270 personas acusadas de haber participado en el intento de golpe de Estado de julio contra el presidente Recep Tayyip Erdogan. Los individuos son juzgados por “intento de derrocar el orden constitucional”, “pertenencia a una organización terrorista” e “intento de derrocar el Parlamento o de impedir que cumpla con su deber”. Entre ellos se encuentra el predicador exiliado en Estados Unidos Fethullah Gülen, señalado por el gobierno de Erdogan como el instigador del levantamiento y quien es juzgado en rebeldía. La primera audiencia comenzó en el marco de un importante dispositivo de seguridad, según informó la agencia de noticias AFP, con presencia de camiones blindados, drones y perros policías.
El jueves, Turquía sufrió un revés cuando la Corte Suprema de Justicia griega rechazó extraditar a los ocho oficiales turcos requeridos por Ankara por su supuesta participación en el fallido golpe de Estado. El tribunal argumentó que los oficiales no tendrían garantizado un juicio justo si regresaran a su país.