Después de tres semanas de intercambios poco fructíferos y de duras amenazas entre las autoridades catalanas y españolas, el presidente de España, Mariano Rajoy, inició los trámites para aplicar el artículo 155 de la Constitución que le permitirá asumir temporalmente las competencias del gobierno autonómico de Cataluña. Su aplicación, que fue aprobada el sábado por un Consejo de Ministros extraordinario, se llevará a cabo a rajatabla, con la convocatoria a elecciones autonómicas anticipadas en un plazo máximo de seis meses y el cese del presidente catalán, Carles Puigdemont, el vicepresidente, Oriol Junqueras, y los ministros de la Generalitat.

Sus funciones serán asumidas por el gobierno español mediante la creación de un órgano específico o desde los ministerios. En tanto, los poderes del Parlamento catalán serán restringidos para que no pueda aprobar ninguna “iniciativa contraria a la Constitución y al Estatut”.

“No era ni nuestro deseo ni nuestra intención”, dijo Rajoy el sábado, al anunciar la noticia. Argumentó que no le quedó otra opción que recurrir al 155, después de hacer varios intentos para que el presidente de Cataluña se “rectificara”. A su entender, la medida tiene cuatro objetivos: “volver a la legalidad”, “recuperar la normalidad y la convivencia”, “continuar con la recuperación económica” y “celebrar elecciones en situación de normalidad”. El siguiente paso es que el Senado lo apruebe, algo que se prevé que suceda este viernes. Rajoy, que participará en la sesión, no tiene obstáculos en la cámara alta, ya que el gobernante Partido Popular cuenta allí con mayoría absoluta y, además, cuenta con el respaldo del Partido Socialista Obrero Español y de Ciudadanos.

Medios españoles como Público confirmaron que la comisión que debatirá el asunto se constituirá mañana y que dará un plazo a Puigdemont hasta el jueves para que presente alegaciones.

Unas horas después del anuncio de Rajoy, Puigdemont dijo que pedirá la celebración de una sesión en el Parlamento catalán para “debatir y decidir” sobre “el intento de liquidar” la autonomía de la región y “actuar en consecuencia”. Esa sesión podría tener lugar el viernes, para coincidir con el debate en el Senado español, según informaron fuentes independentistas a Europa Press. En paralelo, los partidos Junts pel Sí y Candidatura de Unidad Popular plantearon la posibilidad de declarar la independencia de Cataluña “vía exprés” antes de ese día.