De acuerdo con la prensa de Paraguay, fueron entre 40 y 50 integrantes del Primer Comando Capital, una de las principales organizaciones delictivas de Brasil, quienes volaron una sede de la empresa de seguridad Prosegur en la madrugada de ayer. El asalto, que duró más de tres horas, ocurrió en Ciudad del Este, en la zona de la triple frontera, y se estima que los responsables se llevaron entre 20 y 40 millones de dólares.

También según los medios paraguayos, los asaltantes llegaron después de la medianoche en varios vehículos, entre ellos un camión, e hicieron detonar explosivos en distintos puntos de la ciudad para distraer a la Policía o para dificultarle el acceso al lugar. Con otros explosivos, volaron buena parte del local de Prosegur y también afectaron a las casas cercanas. Antes amenazaron a empleados para que no interfirieran y mataron a un policía que cuidaba el edificio. El servicio 911 de la zona recibió esa madrugada 875 pedidos de auxilio.

La persecución a los asaltantes comenzó en Paraguay y siguió en Brasil. Una docena de los perseguidos logró cruzar en lanchas el lago de Itaipú, de acuerdo con la agencia de noticias Efe y el diario ABC Color. Después de tirotearse con la policía, lograron evadirla. En el lado brasileño de la frontera, la Policía mató a tres de los perseguidos y detuvo a otros dos, que habían sido heridos. Además, autoridades de los dos países incautaron diversos vehículos -algunos blindados-, armas, chalecos antibalas, siete kilos de explosivos y una buena cantidad de munición.

Los gobiernos de los dos países reforzaron la seguridad en la zona fronteriza y anunciaron que las policías coordinarían acciones en la persecución, que ayer seguía.