Las elecciones francesas son el antecedente más inmediato de las internas que celebrará el domingo el PD; quizá por eso son tomadas constantemente como referencia por los políticos italianos, a tal punto que el lema de campaña de Renzi, ¡En Camino!, es casi una copia del que utilizó el ganador de la primera vuelta de las elecciones francesas, Emmanuel Macron, ¡En Marcha!

Pero las comparaciones no terminan ahí. Renzi figura como favorito para ganar las internas y sus detractores recuerdan en declaraciones a los medios el caso de las primarias francesas. En esas votaciones, tanto del derechista Los Republicanos, como del socialdemócrata Partido Socialista, los candidatos que se presentaban como favoritos fueron derrotados por François Fillon y Benoît Hamon.

Este antecedente es señalado tanto por quienes dentro del PD respaldan a otros candidatos para secretario general como por quienes dirigen Demócratas y Progresistas, la agrupación que reúne a quienes se fueron del partido por sus diferencias con Renzi. Es que si bien el ex ministro llegó al PD como una figura renovadora, con ese argumento intentó expulsar de sus filas a los dirigentes más tradicionales del partido, lo que generó una fuerte resistencia interna que se vio alimentada por su estilo de dirección, que ha sido calificado de autoritario.

Los rivales de Renzi sabían que aunque la reforma política del ex primer ministro fue derrotada en un referéndum, y eso lo llevó a renunciar al Ejecutivo, eso no implicaba su final político, pero esperaban que al menos lo debilitara.

Renzi se enfrenta en las internas al ministro de Justicia Andrea Orlando -a quien él designó cuando era primer ministro- y al alcalde de Bari, Michele Emiliano. Este último es el referente del sector más tradicionalista del PD y propone devolver el partido a sus orígenes en la izquierda clásica, alejándose de la centroizquierda que promovió el ex primer ministro, que incluyó alianzas puntuales con formaciones de derecha. Orlando, en cambio, tiene posturas similares a las de Renzi pero es considerado un mejor negociador y un dirigente con una actitud menos explosiva.

En la primera votación interna, a comienzos de abril, podían votar sólo los afiliados al partido, que son unas 430.000 personas -de quienes sólo 260.000 participaron-. En cambio, en las primarias del 30 de abril podrán votar todos los que estén dispuestos a inscribirse como simpatizantes del PD y pagar dos euros. En esa primera votación Renzi se impuso con 68% de los votos frente al 25% que obtuvo Orlando y el 6% de Emiliano. Esa votación no es vinculante, como sí lo es la del domingo, en la que se espera que la victoria sea nuevamente para el ex primer ministro.