La Policía de Manchester investigaba como un atentado terrorista lo sucedido anoche en el Manchester Arena después de que terminara un recital de Ariana Grande. En su cuenta de Twitter la Policía confirmó que murieron 19 personas y que otras 50 resultaron heridas durante un incidente cuyo origen todavía no se conocía.

Cientos de personas que estaban en el lugar dijeron a los medios de comunicación británicos que escucharon dos ruidos fuertes, como si fueran explosiones, pero esto no fue confirmado por las autoridades. Después de que se escucharan esos sonidos, la gente empezó a gritar y a correr en dirección a las salidas.

El alcalde de Liverpool, Steve Rotheram, dijo que él asistió con sus dos hijas y su esposa al recital y que vio a decenas de personas tiradas en el piso del Manchester Arena.

En declaraciones a la BBC, el portavoz del Ayuntamiento de Manchester, Pat Carney, se refirió a lo sucedido como si fuera un atentado. “Una sala donde los jóvenes disfrutan de la música es un objetivo muy fácil”, criticó, antes de señalar que las autoridades no sabían si no ocurrirían nuevos ataques.