Los distintos partidos políticos y alianzas que competirán el domingo en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) argentinas cerraron sus campañas. Teóricamente, las PASO son elecciones en las que los ciudadanos eligen al candidato favorito para competir en las legislativas de octubre. Pero en la práctica, los distintos sectores ya tienen pactado quién será su cabeza de lista, y la votación se convierte en una oportunidad de medir fuerzas frente a los rivales. En los últimos actos, los candidatos sintetizaron sus estrategias electorales y afinaron las críticas a los adversarios.
“Durante la campaña no hablé de ningún candidato, aunque todos los candidatos me mencionaban todos los días, como un rezo”, dijo ayer la ex presidenta Cristina Fernández en el acto de cierre de campaña de Unidad Ciudadana, la organización política por la que se postula al Senado por la provincia de Buenos Aires. Esta vez, Fernández se despachó contra su rival directo, el candidato de Cambiemos, Esteban Bullrich, de quien dijo que “lo tienen que esconder”.
Si por algo se destacó la campaña de Bullrich, fue por los errores y las frases polémicas en sus discursos. Ocurrió cuando manifestó su oposición a la legalización del aborto y lo comparó con el feminicidio citando la consigna “Ni una menos”, o cuando salió a pedir disculpas y rectificarse por haber dicho “el camino que hemos emprendido tiene todos los días un metro más de asfalto, una sala más, un pibe más preso”.
Acerca de esas palabras Fernández dijo ayer: “Hay momentos en que la gente muestra su verdadera matriz de pensamiento”. La ex presidenta continuó y dijo que “eso es lo que piensa” Bullrich y que “este candidato lo ha planteado durante toda la campaña”. Además, aseguró que votar al espacio político que ella encabeza, Unidad Ciudadana, es “ponerle un freno al gobierno”. Razonó: “Todos sabemos cuál es el voto más directo y que más va a entender el gobierno para comprender que tiene que cambiar el rumbo”.
En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Unidad Ciudadana se presenta como Unidad Porteña y lleva como candidato a diputado a Daniel Filmus. También este ex ministro de Fernández y de Néstor Kirchner hizo un cierre centrado en la cuestión social y en cómo afectan las políticas del gobierno de Mauricio Macri a la población: “Macri dice que la Argentina arrancó y crece. La verdad que lo único que crece en la Argentina es la desocupación y la pobreza”.
A su vez, la rival oficialista de Filmus, Elisa Carrió, criticó al kirchnerismo defendiendo la política social de Cambiemos: “Espero que la sociedad, y sobre todo los más pobres, entiendan que nunca hubo tanto gasto social para esos sectores. La diferencia es que nosotros no decimos ‘esto es propiedad de Mauricio’. Cuando se lo dan a cambio de los votos se llama esclavitud y uso de los pobres, y si se levantara Evita los mataría”.
En escena
Carrió entró al escenario del acto de cierre de campaña de Cambiemos al ritmo de la canción “La flor más bella”, de Memphis La Blusera, y antes de empezar dijo: “Vengo a pedirles, en nombre de todos nosotros, perdón por muchos errores no forzados cometidos por nosotros. Estamos aprendiendo a ser republicanos”.
Durante su acto de cierre de campaña, Filmus le respondió a Carrió y le dijo públicamente: “Doctora Carrió, no se atreva a citar a la Argentina que hizo tanto por los humildes. No diga que Evita mataría a alguien, porque ella es sinónimo de amor, paz y dignidad”. Y continuó: “Carrió pidió perdón por lo que llamó errores no forzados del gobierno. No son errores. Son políticas destinadas a beneficiar a unos pocos y perjudicar a la mayoría”.
Segura de su victoria en su circunscripción, Carrió se permitió no hacer campaña por sí misma sino por la provincia de Buenos Aires. Por un lado hizo su análisis sobre estas elecciones y las de octubre: “Esta elección está pareja y estamos ahí, pero no se sabe, es incierta objetivamente. Ahora, en octubre veo una victoria clarísima de Cambiemos”. Por otro lado, Carrió cargó contra la ex presidenta: “No porque sea senadora va a dejar de ser lo que es”. Afirmó que “en octubre se polariza mucho más” la elección entre el oficialismo y el kirchnerismo, y se manifestó confiada en que esto beneficiará a su partido.
Macri se presentó en el acto de cierre de campaña de Cambiemos y volvió a hacer campaña política. El presidente argentino se ha referido más de una vez a la crisis política de Venezuela y ha dicho, en alusión al kirchnerismo, que no puede dejar de pensar en que Argentina estuvo cerca de “ir por ese camino”. Ayer volvió a ese discurso y dijo que valía la pena recordar lo que “están viviendo los hermanos de Venezuela, que no pueden elegir con libertad, que están siendo vulnerados sus derechos”.
Volviendo a la política argentina, Macri dijo que la alternativa al oficialismo consiste en poner “parches” a los problemas del país, pero ahora, con su gobierno, “la Argentina arrancó”. Después volvió a apelar a los sentimientos, y así como poco antes había dicho que su gestión se lleva adelante “con el corazón y con la verdad”, se dirigió al votante y le dijo: “Te pienso todos los días, no bajo los brazos, pero no los bajes vos tampoco, porque tenemos que demostrar que este cambio que hemos decidido no fue porque nos parecía lindo, sino a conciencia y poniendo el corazón”.
Muy distinta es la evaluación del gobierno que hizo Fernández. La ex presidenta cuestionó el discurso de Macri, que vinculó la suba del dólar con una supuesta inquietud ante la posibilidad de que ella gane el domingo, y le respondió: “La gente no está nerviosa por las elecciones ni por el dólar, la gente está nerviosa porque no llega a fin de mes”.
La ex presidenta hizo también una autocrítica. Después de llamar a la “humildad y responsabilidad” cuando se conozcan los resultados del domingo, afirmó: “Responsabilidad hemos tenido siempre, pero debo reconocer que a veces no hemos sido tan humildes como hemos podido ser, y eso también es importante reconocerlo”.
Ellos también
Aliado con Margarita Stolbizer, Sergio Massa compite con Bullrich y Fernández como candidato al Senado en la provincia de Buenos Aires. El dirigente, que parte como tercero en discordia entre el oficialismo y el kirchnerismo, intentó centrar su discurso en convencer a los votantes de que él también tiene la posibilidad de ganar. Para ello fueron necesarios malabares discursivos apelando al peronismo y también a la crítica al gobierno anterior y al actual. “Vamos a mostrar que en la Argentina no hay una pelea de dos sino de tres: el pasado manchado por la corrupción, el presente signado por el ajuste y el empobrecimiento, y una alternativa centroprogresista con corazón peronista que pretende mostrarle otra opción a la sociedad”, resumió.
Posicionado en el tablero, Massa también se refirió a su Plan Económico Urgente: “Nuestras medidas permitirían que un jubilado recupere entre 500 y 1.500 pesos todos los meses. Permitirían además que un trabajador dejara de pagar impuesto a las ganancias, con los bancos pagando, como debe ser, impuestos a las ganancias. Permitirían que las boleta de luz y gas fueran 25% más baratas, con plata que ya está en el presupuesto pero que el gobierno está usando para pagar deuda en vez de para beneficiar a la gente”.
Por su parte, Florencio Randazzo, que fue ministro del Interior y de Transporte del kirchnerismo, se presenta en la provincia de Buenos Aires por el Partido Justicialista, y al final de su campaña hizo hincapié en la identidad peronista. Randazzo se presentó ante sus seguidores delante de una gran pantalla en la que se podía observar un enorme escudo peronista, junto al nombre de su frente, Cumplir, mientras sonaban los bombos.