Los adelantos del libro Fuego y furia: dentro de la Casa Blanca de Donald Trump, del autor Michael Wolff, volvieron a reavivar la tensión entre el presidente estadounidense y su ex jefe de estrategia Steve Bannon.

Todo empezó el miércoles, cuando el diario británico The Guardian –que pudo acceder a fragmentos del texto– informó que, en el libro, Bannon califica de “traición” y de “antipatriótica” una reunión que mantuvieron en junio de 2016 el hijo de Trump, Donald Jr; el yerno del presidente, Jared Kushner; el entonces jefe de campaña, Paul Manafort, y la abogada rusa Natalia Veselnitskaya.

El diario agrega que el encuentro se había concretado porque un intermediario le había prometido al hijo del entonces candidato republicano facilitar unos documentos que podían incriminar a la rival demócrata de Trump en las elecciones, Hillary Clinton. De acuerdo con el periódico, Trump Jr respondió en un correo: “Me encanta”.

Además, Bannon le habría asegurado a Wolff que la investigación que lleva a cabo la Justicia estadounidense sobre la supuesta interferencia del Kremlin en las elecciones de 2016 se centrará en el lavado de dinero, siempre según The Guardian.

En líneas generales, el libro plantea además que, en realidad, el objetivo de Trump no era llegar a ser presidente de Estados Unidos, sino potenciar su marca.

Se prevé que el texto de Wolff, que está basado en más de 200 entrevistas con el presidente y su círculo político más cercano, sea publicado la semana que viene. Sin embargo, Charles Harder, uno de los abogados de Trump, envió ayer a Wolff una carta en la que le pide que cancele inmediatamente la publicación. Según informaron medios estadounidenses como Washington Post, Harder pidió al autor del texto y a su editorial que “cesen y desistan de cualquier publicación, revelación o diseminación” del nuevo libro. “Estamos investigando numerosos comentarios falsos y sin base que ha hecho usted sobre el señor Trump”, le informó el abogado al escritor.

En la misma carta, Harder explicó que estudian la posibilidad de que el libro incurra en invasión de la privacidad y en difamaciones contra Trump y su familia. También aseguró que se puede probar una “malicia real”, ya que “el libro admite en la introducción que contiene declaraciones no verdaderas” y no cita a ninguna fuente para muchas de sus “dañinas afirmaciones” sobre el presidente estadounidense. Los defensores de Trump enviaron un documento legal similar a Bannon, a quien le advirtieron que con sus declaraciones “incumplió el acuerdo de confidencialidad”.

El gobernante no se quedó callado y, en un comunicado difundido por la Casa Blanca, aseguró que el libro estaba lleno de “falsas afirmaciones” y de fuentes “que no tienen acceso ni influencia sobre la Casa Blanca”. También acusó a Bannon de haber “perdido la cabeza”.

Por su parte, Bannon reiteró ayer que sigue apoyando a Trump, aseguró que es “un gran hombre” y dijo que “nada se interpondrá nunca” entre él y su ex jefe.