Los gobiernos de Honduras, Guatemala, México y Estados Unidos informaron de una serie de medidas para evitar el avance de la caravana de migrantes hondureños que desde el domingo 14 ha movilizado a 5.400 personas. De ese total, 2.000 ya emprendieron el regreso y más de 3.000 continuaban ayer en la frontera entre Guatemala y México.

Muchos de los que regresaron lo hicieron en el marco del Plan de Retorno Seguro que lanzaron Honduras y Guatemala, con la promesa de “mejorar” las condiciones de vida. Por su parte, el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, dijo el viernes que no permitirá la entrada al territorio de inmigrantes indocumentados, mientras que su par estadounidense, Donald Trump, reiteró que hará “todos los esfuerzos posibles” para evitar que “extranjeros ilegales” ingresen a su país.