Una sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) concluye que Arnaldo Otegi, ex portavoz de Batasuna, y otros cuatro dirigentes de sectores de la izquierda separatista vasca –Rafa Díez, Sonia Jacinto, Miren Zabaleta y Arkaitz Rodríguez– no tuvieron un juicio justo en el denominado caso Bateragune. Este proceso judicial fue llevado adelante por la Justicia española contra varios miembros de la izquierda nacionalista vasca. Fueron acusados de intentar reconstruir a la agrupación política Batasuna para formar un frente independentista siguiendo órdenes expresas de la cúpula de la organización armada Euskadi Ta Askatasuna (ETA).

Todos los acusados fueron condenados y cumplieron penas de prisión de unos seis años tras el veredicto tomado por la magistrada de la Audiencia Nacional, Ángela Murillo. Por esta situación, Otegi y los otros cuatro dirigentes presentaron un recurso ante el TEDH, debido a la “parcialidad” de la jueza durante el desarrollo del proceso.

El tribunal europeo dio su veredicto ayer, y sentenció que se ha producido una vulneración del artículo 6.1 del Convenio Europeo de Derechos Humanos sobre todos los condenados en el procedimiento llevado adelante por la Audiencia Nacional en 2010 y cuya sentencia confirmó el Tribunal Supremo en 2011.

En la sentencia, la corte europea sostiene que “el recelo” de Otegi y los otros demandantes hacia la jueza podía considerarse “objetivamente justificado”, si se tiene en cuenta que sólo dos meses antes el Tribunal Supremo había aceptado la recusación de Murillo en otro caso vinculado con este.

Los demandantes acudieron al TEDH tras agotar la vía judicial en España, y ayer los siete jueces que componían la sala europea les dieron la razón por unanimidad.

De todas maneras, el fallo del tribunal descarta una indemnización o cualquier otra medida en favor de los cinco afectados. Además, se mantiene vigente la inhabilitación para Otegi, quien no podrá aspirar a ocupar cargos públicos hasta 2021.

Tras conocerse la decisión, Otegi dio una conferencia de prensa en Bruselas, acompañado por varios diputados, en la que expresó su satisfacción por el fallo del TEDH. “La sentencia confirma que hicimos una apuesta por la paz y que el Estado español es antidemocrático”, dijo Otegi, quien además agregó: “Hoy nuestra sonrisa es más amplia”, aunque dijo que nadie les va a devolver los seis años y medio que pasaron en prisión.

El dirigente aseveró además que el TEDH “ha corroborado” el relato de sus compañeros que fueron condenados junto a él y ha calificado el juicio de “una operación de Estado que buscaba impedir que la izquierda independentista apostara por las vías pacíficas y democráticas” [...] “Nosotros no estábamos reconstruyendo una organización violenta, estábamos haciendo una apuesta por la paz”, afirmó Otegi.

Por último, el político dijo que el Estado español “tiene derecho a defender la unidad de España, pero desde una seducción democrática y no por la fuerza”.

El último boletín de ETA

El diario vasco Gara difundió ayer una información citada por la agencia de noticias Europa Press que refiere al último boletín interno de la organización ETA –denominado zutabe en euskera–, elaborado en abril, en el que el grupo armado vasco pone cifras definitivas a la actividad que desarrolló durante medio siglo. En este último zutabe, ETA reconoce además la autoría de dos atentados que no había reivindicado hasta el momento, que se suman a los 2.604 que ya había asumido con anterioridad.

Uno de estos atentados, que se suman a la larga lista de acciones de la organización separatista, son la matanza en la cafetería Rolando de la calle del Correo de Madrid, donde una bomba mató a 13 personas en 1974. Dicha cafetería fue elegida como blanco porque era frecuentada por policías debido a la cercanía de la Dirección General de Seguridad (DGS). El otro es un triple asesinato ocurrido en la ciudad de Tolosa, en Guipúzcoa, en 1981. En el documento, la organización armada que anunció su disolución definitiva en abril reconoció que asesinó a 758 personas en sus atentados, alrededor de un centenar menos de las que le atribuyen el Ministerio del Interior y las asociaciones de víctimas.

Al especificar sus acciones contra objetivos no civiles, en el comunicado se indica que ETA cometió 365 atentados contra la Guardia Civil y mató a 186 de sus funcionarios; que llevó adelante 215 acciones contra cuerpos policiales españoles en las que murieron 139 policías; y que en 147 acciones contra el Ejército español fallecieron 101 militares (“entre ellos un almirante, dos vicealmirantes, 12 generales, 31 coroneles, siete capitanes y 11 comandantes”, se detalla), además de 11 funcionarios civiles de la Armada.

También en el comunicado la organización se refiere al atentado de Hipercor como “el mayor error y desgracia” que cometieron durante su medio siglo de vida. “Esa acción dejó una alargada sombra, pues, además del irremediable daño humano y [del] dolor causado, provocó dudas sobre las características de la lucha armada [...]. Que ETA asumiera totalmente su responsabilidad y realizara [una] autocrítica no minimizó del todo esas consecuencias negativas”, se indica en el comunicado.

En el atentado en el supermercado Hipercor de Barcelona, cometido el 19 de junio de 1987, murieron 21 personas y 45 fueron heridas.