El presidente venezolano, Nicolás Maduro, dijo ayer a medios internacionales, en conferencia de prensa, que el gobierno de Estados Unidos busca asesinarlo para “imponer un gobierno dictatorial”, y responsabilizó directamente a John Bolton, asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca. “Existe un plan, propiciado por John Bolton, de entrenar fuerzas mercenarias que ejecutarán ‘falsos positivos’ [asesinatos que se hacen pasar por muertes en combate] a fuerzas militares en la frontera para confundir a la opinión pública y justificar un ataque a Venezuela”, afirmó.

Esta no es la primera vez que el presidente venezolano denuncia que el gobierno estadounidense tiene intención de asesinarlo. En este caso, junto a su afirmación, Maduro mostró en un mapa digital la posición del supuesto campamento en el que se prepara el atentado.

El gobernante agregó que existe una campaña mediática persistente de Estados Unidos contra su país. Según dijo, desde enero hasta ahora se han publicado más de 4.142 noticias negativas sobre Venezuela en 90 medios de prensa estadounidenses. “Es una campaña infame y permanente para negar la democracia y así justificar cualquier acción promovida contra la paz del pueblo venezolano”, sentenció. “¿Por qué nos llaman ‘dictador’? Para justificar cualquier acción contra Venezuela”, afirmó Maduro.

Durante su contacto con los medios internacionales, el mandatario –que gobierna Venezuela desde 2013– recordó además el atentado del que fue objeto el 4 de agosto durante un desfile militar en la avenida Bolívar de Caracas y afirmó: “El dron que lanzaron para matarme lo prepararon en Colombia, bajo la supervisión del ex presidente [Juan Manuel] Santos, pero por órdenes directas de la Casa Blanca”. Finalmente, Maduro le pidió al gobierno de Estados Unidos “cesar en sus campañas y sus planes contra la paz en Venezuela”, y solicitó a su canciller, Jorge Arreaza, que cite al encargado de negocios estadounidense en Caracas, James Story, por la supuesta intromisión de Estados Unidos en los asuntos internos del país.

Otro ingrediente adicional que mantiene los niveles de tensión muy altos entre Estados Unidos y Venezuela es la estrecha relación de Caracas con Moscú. El lunes llegaron a Venezuela dos bombarderos rusos con capacidad para llevar armas nucleares, para hacer ejercicios militares en ese país. El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, reaccionó diciendo que la operación involucra a “dos gobiernos corruptos despilfarrando dinero público”. En respuesta, la cancillería rusa calificó los dichos de Pompeo de “completamente inapropiados”.

El 10 de enero Maduro comenzará un nuevo período de gobierno, hasta 2025, luego de haber ganado las elecciones de mayo, que fueron muy cuestionadas por la oposición, lo que llevó a que incluso la mayoría de los partidos no apoyaran a un candidato. Algunos países ya anunciaron que no reconocerán al nuevo gobierno de Maduro por haber sido electo en forma ilegítima.