El senador del Frente Amplio (FA) Leonardo de León, anunció en una carta pública que tomó la decisión de no participar en las elecciones del próximo año. El uso de la tarjeta corporativa de Alur por parte de De León fue objeto de un informe del Tribunal de Conducta Política (TCP) del FA, que consideró que incurrió en “múltiples actos indebidos” en perjuicio del patrimonio público. El informe será tratado en el Plenario del FA de este sábado junto al del ex vicepresidente Raúl Sendic. En el oficialismo hay negociaciones dirigidas a sancionar a ambos inhabilitándolos durante un año, lo que les impediría participar en las elecciones de 2019.
Adelantándose, De León indicó en su carta pública que decidió “no participar en las distintas instancias electorales que se desarrollarán entre 2019 y 2020” en mayo, cuando la jueza Beatriz Larrieu archivó la denuncia presentada en su contra por el senador Pablo Mieres, del Partido Independiente, sobre el uso irregular de la tarjeta corporativa de Alur.
“Es una decisión que tiene en su génesis razones políticas y decisiones familiares. Mi familia, mis compañeros más cercanos de mi sector político, algunos de otros sectores, amigos, ya conocían esta decisión”, indica De León en la carta, en la que también aclara que no dejará la actividad política “ni mucho menos”.
En la misiva, De León asegura que jamás cometió “ningún acto ilegal” y que tiene la “conciencia tranquila de que la buena fe” siempre fue la que dirigió sus actos.
Críticas al TCP y a la oposición
Además del anuncio, la carta incluye críticas al TCP y a la oposición. De León acusa a esta última de haber presentado múltiples denuncias contra “un sinfín de actores” a raíz de la comisión investigadora de Ancap “con el único objetivo de instalar ante la opinión pública el Lava jato uruguayo” y de exponerlos “al menosprecio y al odio público”.
Al referirse a la actuación del TCP, De León aclara que no adjetivará el fallo ni hará públicos sus descargos, pero sí señala que no comparte su contenido y se pregunta si el órgano no debería haber visto como “un acto de grandeza” que, ante la denuncia de Mieres, él haya preferido presentarse a la Justicia y no ampararse en los fueros. Acerca del FA, se pregunta: “¿Cómo debería tomarse por parte de un partido político democrático el hecho de que uno de sus miembros haya sorteado el riguroso escollo de la legalidad a través de los órganos que la Constitución establece para juzgar la conducta de todos los habitantes?”.
Por último, De Leon cierra la carta con la frase “¡Al margen de la ley, nada; por encima de la ley, nadie!”.