Las autoridades de la ciudad francesa de Estrasburgo buscaban anoche a Chérif Chekatt, de 29 años, a quien identificaron como el autor de un ataque armado en las inmediaciones de un mercado navideño en la ciudad francesa de Estrasburgo. Ocurrió el martes de noche y dejó tres muertos y 13 heridos, varios de ellos graves.

El atacante, que según testigos gritó “¡Alá es grande!”, se convirió en islamista radical después de su último período en prisión en Francia, en 2015. Chekatt había sido detenido en ese país y también en Alemania y Suiza, y condenado en 27 ocasiones por delitos de violencia, robo o destrucción de propiedades.

Luego del tiroteo ocurrido en el centro de Estrasburgo, ciudad situada en el extremo este de Francia, muy cerca de la frontera con Alemania, el gobierno decidió reforzar su nivel de alerta antiterrorista. Según informó el ministro del Interior, Christophe Castaner, se pasó a un nivel de “urgencia por atentado”, lo que implica controles reforzados en las fronteras y otros adicionales en los mercados navideños, que abundan en Francia en esta época del año.

“El terrorismo ha golpeado de nuevo nuestro territorio”, dijo ayer el fiscal de París, Rémy Heitz, en el marco de una conferencia de prensa en la que relató cómo transcurrió el ataque.

Las autoridades sospechan que el responsable del atentado pudo haber actuado después de una operación policial desplegada el martes de mañana en la casa de Chekatt. La Policía fue a su vivienda para arrestarlo –según informó la prensa francesa, por tentativa de homicidio y robo– y se encontró con una granada, un fusil, cuatro cuchillos grandes y municiones, de acuerdo a los datos aportados por el fiscal. En el ataque del martes, el supuesto responsable utilizó un arma de fuego y también un arma blanca.

Las autoridades intentan ahora averiguar cuál fue su itinerario y si tuvo algún cómplice. El fiscal Heitz confirmó que cuatro personas vinculadas con Chekatt están detenidas. Según fuentes citadas por France Info, se trata de sus padres y dos hermanos.

La Policía Nacional francesa solicitó la colaboración de la ciudadanía difundiendo la foto del sospechoso, junto a un texto que indica que tiene “29 años, mide 1,80 metros, es de complexión normal, lleva el pelo corto y puede llevar barba. Moreno de piel y con una marca en la frente”.

Las autoridades policiales a cargo del caso consideran la posibilidad de que el atacante haya podido romper el cerco dispuesto en torno a Estrasburgo y pasado hacia Alemania, según indicó el secretario de Estado de Interior francés, Laurent Núñez, citado por la agencia AFP. Por eso también la Policía alemana está en alerta.